Nueve meses después de que estallara la pandemia el Sindicato Profesional de Policías Locales y Bomberos (SPPLB), el segundo con mayor representación en el Ayuntamiento de Valencia, decidió repartir mascarillas de tela lavable con la bandera de España y el escudo de la organización a los policías locales, debido a que estos profesionales no disponían del material sanitario requerido para desempeñar sus funciones. Sin embargo, el Ayuntamiento de Valencia ha anunciado que a partir de ahora solo se pueden utilizar las que ellos proporcionan, por tanto, el resto quedan desautorizadas.

Según el representante del sindicato SPPLB, Jesús Santos, la concejalía de Policía reparte solo cinco mascarillas quirúrgicas a los agentes, que son válidas para cuatro horas, y dos FPP2 para 12 horas de protección. Asimismo, cuenta con dos mascarillas más corporativas de tela, pero los trabajadores denuncian que son insuficientes para toda la jornada laboral.

El Ayuntamiento no entra en valorar la falta de material y solo subraya que han prohibido el uso de esa mascarilla porque no están homologadas correctamente ni pueden asegurar la protección de los agentes, responsabilidad que les corresponde.

El sindicato recalca que la policía local lleva desde principio de la pandemia utilizando las mascarillas que ellos han considerado más adecuadas y el gobierno no ha intervenido. Además, SPPLB asegura que las mascarillas que han distribuido cuentan con el mismo nivel de protección que las del Ayuntamiento, una eficacia de filtración que supera el 96%.

Con estas nuevas restricciones, los trabajadores deberán comprar mascarillas idénticas a las que reparte el Ejecutivo para sustituir a las que tenían hasta ahora para compensar la carencia de este material y así mantener un aspecto uniforme en todo el cuerpo.