La jubilación del presidente en funciones del Consejo General del Poder Judicial, Rafael Mozo, ha abierto un cisma, el enésimo, en el seno del órgano de Gobierno de los jueces que lleva más de cuatro años y medio caducado. Mozo ha adelantado el pleno para hacerlo coincidir con su jubilación y que se pueda decidir quién será la persona que se ponga al frente del CGPJ. Por edad, el elegido ha sido el conservador Vicente Guilarte, pero el problema estribaba en que Guilarte es abogado y profesor universitario, y la plaza de presidente obliga a la dedicación exclusiva, por lo que se vería obligado a dejar sus actuales trabajos y no quiere. Desde el propio CGPJ informan de que Guilarte ha asumido la presidencia como vocal de más edad y ha dejado los trabajos fuera del consejo.

El motivo de la exclusividad es la que ha hecho que seis vocales progresistas, Álvaro Cuesta, Pilar Sepúlveda y Clara Martínez de Careaga y los conservadores Juan Manuel Fernández, Nuria Díaz Abad y Juan Martínez Moya, hayan incluido en el orden del día el debate sobre las condiciones para el desempeño de la presidencia del órgano de gobierno de los jueces por sustitución. Y finalmente, Guilarte ha asumido ese hecho y estará en exclusividad en el CGPJ.

Según ha podido saber ElPlural.com de fuentes del consejo General del Poder Judicial, pese a la petición de los vocales progresistas de debate las condiciones de desempeño, finalmente no ha hecho falta, ya que "no se ha votado el punto porque Vicente Guilarte ha aceptado la propuesta y ha manifestado que dejaba de desempeñar los trabajos que hasta ahora eran su modo de vida". Las mismas fuentes informan de que, por un lado, dejará su trabajo de abogado y, por otro, solicitará la jubilación como catedrático de derecho civil.

Su primera decisión será convocar un pleno el próximo día 25 de julio. En dicho pleno, será la primera vez en la que esté como presidente del órgano de Gobierno de los jueces en sustitución de Rafael Mozo. Las fuentes indican que este pleno se convoca para realizar los ajustes necesarios en las diferentes comisiones.

Nuevo presidente, pero sin renovación 

La salida de Mozo ha tenido como consecuencia el nombramiento de otro vocal para que esté al frente del órgano. En este caso la presidencia ha recaído sobre el conservado Vicente Guilarte, quien se ha visto obligado a renunciar a su trabajo como abogado, así como a su plaza de catedrático de derecho civil, ya que la presidencia obliga a la exclusividad. La jubilación de Rafael Mozo merma, más aun si cabe, el CGPJ que se queda con 16 miembros de los 21 que debería de tener. La falta de acuerdo entre PP y PSOE para alcanzar un acuerdo de renovación ha hecho que los vocales lleven nueve años y medio en el consejo, cuatro y medio más de los que debería.

Sobre la citada renovación, por el momento ni hay ni se esperan indicios de un posible acuerdo entre los grande partidos. De hecho, no será hasta que haya un nuevo Gobierno que se puede volver a negociar, ya que los nombramientos deben ser acordados por tres quintos del Congreso de los Diputados y, actualmente, las cortes están disueltas. Por lo tanto, dicha renovación no entrará en las agendas de los partidos hasta, mínimo, el mes de septiembre, a solo dos meses de cumplirse los cinco años caducado el mandato de los actuales vocales del órgano de Gobierno de los jueces.

Carta de Mozo

El ya expresidente del CGPJ ha aprovechado su último día en el consejo para enviar una carta a todos sus compañeros. Una carta de despedida en la que asevera que se marcha con un sabor agridulce. “No obstante, a la hora del adiós, me embarga un sentimiento agridulce, pues, entre los sinsabores, sin duda, la anomalía constitucional que supone la falta de renovación del Consejo, que debía haberse producido a finales de 2018, ocupa el lugar más destacado. La prolongación en el tiempo de esta situación y la ausencia de perspectivas de un acuerdo entre las fuerzas políticas que la pusiera fin, así como la presentación de la renuncia del presidente Carlos Lesmes, son hechos que han generado uno de los episodios más tristes de nuestra historia democrática”, dice en su misiva.

Una carta en la que también asevera que: “con la firmeza que me permite el largo tiempo transcurrido -desde el 4 de diciembre de 2018- mi petición a las fuerzas políticas concernidas, para que, sin excusa ni pretexto alguno, se tomen en serio esas recomendaciones y para que procedan de inmediato, en cuanto termine el proceso electoral en el que nos hallamos inmersos, a la renovación de este órgano de gobierno, que nos reclama no sólo la Constitución Española, sino también la Unión Europea de la que formamos parte desde 1986. El mantenimiento de esta situación debilita y erosiona las principales instituciones de la Justicia española y, por tanto, de nuestro Estado de Derecho”.

El Currículum

Vicente Guilarte nació en Bilbao en 1953 y ejerce la abogacía desde 1979. Asesor Jurídico de la Universidad de Valladolid desde 1988, fue catedrático de Derecho Civil de la Facultad de Derecho de Burgos y desde 1991 es catedrático de Derecho Civil de la Universidad de Valladolid. Además, es miembro de la Real Academia de Legislación y Jurisprudencia de Valladolid, letrado-director de la Asesoría Jurídica del Colegio de Registradores de la Propiedad y Mercantiles de España y miembro del Consejo Editorial de la Revista Abogados del Consejo General de la Abogacía Española. Designado por el Senado vocal del Consejo General del Poder Judicial en diciembre de 2013, Guilarte es autor de numerosas monografías y artículos doctrinales en revistas especializadas y director de diversos cursos y proyectos de investigación y tesis doctorales.