El Juzgado de Instrucción Número 2 de Logroño ha levantado el secreto de sumario que pesaba sobre la causa abierta por el asesinato de un niño de nueve años. El magistrado ha seguido lo dispuesto por la Ley de Enjuiciamiento Criminal que obliga a levantar el secreto a la mayor brevedad posible, garantizando así el derecho de defensa del imputado.

El caso, que ha conmocionado a todo un país, sucedió cuando un niño, Alex, desapareció de un parque mientras jugaba con unos amigos durante un cumpleaños. Los críos, asustados, avisaron a los padres quienes se movilizaron de inmediato. Fue gracias a un vecino que supieron que el pequeño Alex estaba en una casa a escasos metros.

Cuando llegaron los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado el pequeño Alex aun respiraba, pero, pese a los esfuerzos del cuerpo médico, el niño acabó falleciendo. El problema con este caso ha sido la reincidencia del asesino.

El detenido tenía dos condenas previas. La primera por el abuso de una menor por la que fue condenado a siete años. La segunda, por la agresión sexual y el asesinato de una agente inmobiliaria por la que cumplía una condena de 30 años en el momento del asesinato del niño de Lardero. De hecho, dicha condena se extinguía en el 2023.

A todo ello hay que sumar que, según los vecinos del barrio, este hombre había tratado de secuestrar a otras niñas del barrio en los últimos meses, lo que ha generado, no solo una sensación de impotencia, sino de rabia que llevó a los vecinos a tratar de lincharle el día de su detención. Hecho que pudo ser evitado gracias a la Guardia Civil.

En el plano político, todos los partidos de la oposición han salido en tromba en contra del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, por la puesta en libertad del asesino del niño teniendo los informes en contra de Instituciones Penitenciarias, e incluso de su propio abogado quien advirtió de su perfil en el año 1998. Sin embargo, el ministro asegura que todo se ha hecho “conforme a la legalidad”.