La fiscal general del Estado, Dolores Delgado, ha asegurado que la investigación al rey emérito Juan Carlos I es histórica y que la Fiscalía la ha realizado con rigor, profesionalidad, "sin cortapisas y sin limitaciones", hasta las últimas consecuencias fácticas y jurídicas.

"Seguramente hay gente que piensa que podíamos haber hecho más pero esta es la ley. Nos puede gustar más o menos, se puede cambiar o no, pero esa no es nuestra función", ha dicho en una entrevista en La Vanguardia publicada este domingo.

Preguntada por si la Fiscalía española ha sido demasiado indulgente, después de que la justicia británica haya mantenido un proceso abierto al rey, ha respondido que cada país tiene su legislación, sus normas y su historia, y que el Reino Unido "tiene otra con distinta proyección sobre los exjefes de Estado para determinados delitos".

"Los poderes públicos nos debemos a la soberanía popular porque estamos al servicio de la sociedad. Nosotros tenemos esta legislación. ¿Se puede cambiar? Seguro ¿Se puede mejorar? Seguro ¿se puede mantener? Seguro", ha añadido.

Ha defendido que hay resoluciones del Tribunal Supremo y del Tribunal Constitucional que han "marcado la interpretación sobre la inviolabilidad" del emérito, y asegura que si en un futuro los representantes de la soberanía popular proponen otro marco normativo, se aplicará.

Un ''hostigamiento'' sin precedentes

Delgado ha dicho que ha tenido oposición política dentro de la propia Fiscalía y que sufre "un nivel de hostigamiento que no se había dado hasta ahora con ningún fiscal general del Estado", aunque destaca que se siente orgullosa de su tarea en temas, dice, de gran trascendencia histórica.

Ha explicado que la introducción de una enmienda para que una vez acabe su mandato pueda ser fiscal de Sala es una exigencia de Europa para "blindar a los fiscales de presiones externas o internas" y que permite una mejor prestación del servicio público de la justicia.