No hay momento más dulce que aquel en el que los padres salen con su recién nacido del hospital. Sin embargo, cuando por alguna razón, el pequeño ha de quedar ingresado en la UCI Neonatal, la felicidad puede transformarse en sentimientos de ansiedad, miedo y frustración. 

Reducir estas sensaciones y aumentar la tranquilidad y la confianza es el fin de la iniciativa que el grupo Quirónsalud ha puesto en marcha en los hospitales públicos de Madrid que gestiona: los hospitales universitarios Fundación Jiménez Díaz, Infanta Elena (Valdemoro), Rey Juan Carlos (Móstoles) y General de Villalba.

Se trata de unas cámaras web instaladas en las cunas de este servicio que permiten a los padres ver en cualquier momento a su bebé a través del dispositivo en el que tengan instalado el Portal del Paciente, aplicación en la que está alojada la herramienta.

"Se trata de que los padres que se ven obligados a ausentarse puntualmente del hospital y dejar a su bebé en la Unidad Neonatal, lo que siempre produce ansiedad, tengan la posibilidad y seguridad de ver cómo está su niño y los cuidados que se le aplican", explica Eva Rueda, responsable del Servicio de Información y Atención al Paciente de la Fundación Jiménez Díaz.

Estos centros ya cuentan con un protocolo de puertas abiertas, que favorece que los  padres pasen el mayor tiempo posible junto a sus hijos, todo el que quieran y puedan, sin horarios ni restricciones. De este modo, apunta, “están mejor informados y pueden participar e implicarse en el cuidado del recién nacido en un proceso continuo de aprendizaje junto con los profesionales de la unidad”. “Comprueban y comparten la evolución del pequeño y se sienten más seguros”, resume.

Sin embargo, esto no siempre es posible. La estancia puede ser de días, pero también de meses.  “La  media es de unos 20 días y no siempre les es factible estar presentes”, apunta Rueda. A veces tienen que ausentarse, alguno de los dos tiene que “incorporarse a su trabajo, ocuparse de otros hijos o atender compromisos familiares”, matiza.

El sistema es muy útil también en los casos en los que la madre ha tenido una cesárea complicada y necesita recuperarse en algunos momentos en la habitación, y permite, incluso, que los hermanos puedan conocer al nuevo integrante de la familia antes de que este sea dado de alta y llegar a su nuevo hogar.

En tiempo real las 24 horas del día

Las cámaras muestran al pequeño en tiempo real y las 24 horas del día, “con información inmediata si el servicio no está disponible debido a la realización de pruebas al recién nacido”, explica la responsable del Servicio de Información y Atención al Paciente de la FJD.

Los padres pueden ver a su hijo desde el móvil, la tablet u el ordenador.

Para garantizar la privacidad y seguridad en su uso, el hospital no guarda grabación de las imágenes, no se reproduce sonido y solo está disponible para los progenitores. Se activa

automáticamente para la madre y el padre, si desea tener acceso a esta función, debe dar de alta en su aplicación al menor como tutelado. La herramienta está disponible a través del Portal del Paciente.

Transparencia, seguridad y comunicación

La iniciativa supone un nuevo paso en la estrategia de Humanización de la Asistencia Sanitaria de los cuatro centros y permite complementar la información y la atención sanitaria que se ofrece en la UCI Neonatal, así como mejorar la calidad asistencial percibida por los padres desde el punto de vista humano.

“Implica un ejercicio de transparencia para el hospital que mejora la seguridad del paciente, así como la comunicación con los padres” insiste Rueda.

Así lo corrobora Virginia, madre de Érika y Valeria, dos niñas prematuras que vinieron al mundo, hace un mes, con 30 semanas y 5 días de gestación.  Ella es uno de los 340.000 usuarios dados de alta en esta aplicación en el conjunto de los cuatro centros.

"Dejarlas aquí e irte a casa es muy difícil, pero sé que están bien cuidadas, y poder verlas cuando quiera a través de la webcam me deja más tranquila", explica. "Me conecto todas las veces que puedo: desde casa, en el trayecto hacia allí o de regreso al hospital, en la calle…",  confiesa, a lo que añade que le parece “una idea estupenda que me aporta tranquilidad".