La ciudad de Oviedo se encuentra completamente conmocionada ante la muerte de dos hermanas mellizas que se han precipitado al vacío desde un sexto piso. Un suceso que tuvo lugar durante la mañana del pasado viernes, sobre las 9:00, en el número 45 de la calle Facetos del barrio de La Ería, en la zona este de la ciudad asturiana.

Según apuntan los primeros datos desvelados del caso, las pequeñas, de 12 años de edad, vivían en la cuarta planta de un bloque de la calle mencionada. Sin embargo, cuando estaban dirigiéndose al colegio, subieron al sexto piso del inmueble y, desde ahí, se arrojaron al vacío.

"Las niñas se disponían a acudir al colegio como un día normal más. Sin embargo, ambas decidieron subir desde la cuarta planta donde vivían, hasta la sexta. Una vez allí dejaron las mochilas en el rellano y se precipitaron al patio interior, muriendo en el acto", aseguran las primeras informaciones. Hasta el lugar de los hechos se desplazaron las unidades sanitarias, que no pudieron hacer nada por ayudar a las pequeñas, ya fallecidas, salvo certificar su muerte.

En el programa Cuatro al día se han puesto en contacto con Rosa, una vecina residente en el mismo bloque que la familia y que aseguró asomarse a la ventana tras haber escuchado voces. "Había una hoja de la última ventana abierta y deduje que se había tirado una y después otra. En el levantamiento del cadáver, vi que una estaba boca abajo y otra en cuclillas", relató en su testimonio.

Las investigaciones de la Policía aún no han concluido. Todavía se desconocen cuáles han sido los motivos que llevaron a las menores a precipitarse por el patio interior del inmueble. En la misma línea, las brigadas de la policía científica y judicial se encuentran también recopilando información que pueda ayudar a determinar las causas de este "trágico suceso", tal y como lo han calificado las autoridades mencionadas. Por lo pronto, la Policía ha descartado que terceras personas hayan participado en lo ocurrido, sino que han sido las niñas, por su propio pie, quienes han saltado al vacío.

"Parece ser que no hay intervención de terceras personas y que podemos hablar de un suceso muy trágico y muy lamentable", ha dicho el portavoz policial, Pedro Aguado, quien, ante la insistencia de la prensa, ha evitado referirse a lo ocurrido como un accidente y ha insistido en calificarlo de "suceso trágico". 

Rosa, la entrevistada en el programa de Cuatro, aseguró también que su nieto era compañero del colegio de las niñas, y que el niño le había contado que sufrían bullying. También añadió que "habían dejado una nota" confirmando que sufrían acoso escolar, datos que podrían abrir una nueva línea en la investigación y dar lugar a la posibilidad de que este suicidio se haya visto motivado por la situación que vivían en la escuela.

"Eran una familia muy normal"

En el momento en que las niñas se precipitaron al vacío, los padres, de 43 y 44 años, se encontraban en el domicilio familiar. El padre fue trasladado al hospital, fruto del fuerte shock que le produjo el suceso. La madre, por su parte, fue al colegio a recoger al hermano de las pequeñas, de 10 años, para contarle lo que había pasado. 

La familia era originaria de Rusia y llevaba ya varios años en España. Según ha declarado un vecino y amigo de la familia, se trataba de "una familia muy normal, muy integrada y muy cariñosa", unas palabras certificadas por el concejal de Seguridad Ciudadana, José Ramón Prado.

Un caso similar en Barcelona hace solo tres meses

Este trágico suceso en Oviedo recuerda, por su similitud, a otro que tuvo lugar en Barcelona hace tan solo tres meses. En Salent, dos hermanas gemelas también se arrojaron al vacío desde un tercer piso. En aquella ocasión, una de ellas, Alana, falleció, mientras que Leila, su gemela, resultó herida grave pero sobrevivió a la fuerte caída. 

Estos hechos han puesto de manifiesto la importancia del cuidado de la salud mental, especialmente la de los más jóvenes. Por ello, la ministra de Política Territorial y portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, ha tildado este suceso como "escalofriante". En la misma línea, ha añadido que "a pesar de las herramientas que ya están en marcha para hacer frente a casos como este, claramente, la sanidad pública ha de abordar el problema de salud mental, especialmente en las etapas más jóvenes de la vida".

Por su parte, el presidente del Principado, Adrián Barbón, ha dicho sentirse "consternado" y ha reconocido que deben ponerse esfuerzos adicionales en mejorar todo lo relacionado con la salud mental de los jóvenes y niños. "Aún hay que esperar a que la investigación aclare las circunstancias que rodean este trágico suceso, pero lo que está claro es que debemos poner especiales cuidados en la salud mental de los más jóvenes", ha sentenciado.