El coronavirus ha provocado que la salud mental ocupe, por fin, un espacio en el Congreso. El pasado mes de marzo el portavoz de Más País, Íñigo Errejón, planteó al Gobierno la posibilidad de llevar a cabo un plan de choque para invertir más en esta lacra, agravada en los dos últimos años.
El portavoz madrileño y su propuesta recibieron un “vete al médico” como respuesta del parlamentario del PP Carmelo Romero y el aplauso casi unánime del hemiciclo.
Esta semana, y en una línea similar, Unidas Podemos planteaba una ley de Salud Mental cuyo eje central es la ampliación del número de profesionales por cada 100.000 habitantes.
Íñigo Errejón propone un plan de choque para la salud mental y un diputado de la derecha le grita "vete al médico". Canal CongresoDatos devastadores
Los datos que tienen que ver con la salud mental en nuestro país son realmente preocupantes, más después de la pandemia. El 40% de los españoles afirma haber tenido un problema de este tipo desde el inicio del coronavirus, según un estudio realizado por la Universidad Complutense y el equipo de la Cátedra Contra el Estigma de Grupo 5.
Asimismo, la OMS detalla que 6 de cada 10 personas presentan fatiga pandémica como consecuencia del encierro o de haber perdido a algún familiar durante estos meses.
Otra información relevante es que el 25% de las consultas en Atención Primaria son por síntomas de salud mental y que el 10% de la población está diagnosticada con algún problema (un 2% con alguno grave).
A eso hay que añadirle que, en el último año y medio, se han duplicado los intentos de conductas suicidas, según cuenta a ElPlural.com el director del Hospital de Día de Salud Mental Ponzano –perteneciente al Hospital Clínico San Carlos- y diputado de Más Madrid en la Asamblea. Diego Figuera: “Hay que conceder salidas a quien viene a un hospital por un intento de suicidio… que pueda tener una atención en condiciones en 48 horas; y no un bodrio”.
En este caso concreto, el miembro del partido madrileño insiste en que no puede pasar tanto tiempo entre consultas “porque se sabe que, si alguien tiene un intento de suicidio en los próximos seis meses, tiene una probabilidad del 40% de que lo vuelva a intentar” y “con dos o más intentos” la probabilidad de que fallezca aumenta.
Ampliación de recursos
Por todo ello es necesario dotar de más recursos a la sanidad pública. El propio Figuera nos cuenta un poco mejor cuál es el plan de choque que plantea su partido, también en la Comunidad de Madrid, y que pasa por doblar los recursos en Atención Primaria y Atención Especializada, disminuir las listas de espera, aumentar el tiempo de las sesiones y mejorar la capacidad de prevención.
En esta línea, la formación capitaneada por Mónica García estima destinar mínimo un 10% de los recursos a la salud mental y doblar las plantillas de psicólogos clínicos por 100.00 habitantes; ya que ahora está en el 4,1% cuando la media nacional es del 10% y la de Europa del 18%. También subraya la importancia de disminuir las listas de espera y aumentar el tiempo o el número de sesiones
“Pasan 180 días de media para tener cita con un psicólogo y se hacen una cita al mes o mes y medio; aproximadamente de 35-40 minutos. Eso no es una terapia. Eso es una chapuza…”, lamenta Figuera. En este aspecto la formación que a nivel nacional lider Errejón piden "disminuir la lista de espera hasta dejarla en 10 días".
Asimismo, el diputado de Más Madrid en la Asamblea insiste en la idea de llevar a cabo un pleno monográfico, ya que éste se ha pospuesto hasta en dos ocasiones, uno por culpa de la pandemia y otro por la convocatoria de elecciones por parte de la presidenta regiona, Isabel Díaz Ayuso.
Otro de los aspectos que critica es que apenas se preste atención, en ocasiones, a la salud mental en los niños y los jóvenes y que se haya “medicalizado el sufrimiento” en toda la población. “Éramos el segundo país del mundo que más fármacos toma, solo por detrás de Estados Unidos. Quizás los datos hayan variado algo, pero siempre hemos estado ahí”, demanda.
Hay salida: pedir ayuda y normalizarlo para superar el estigma
Hablamos también con el director de RECURRA-GINSO, Javier Urra, doctor en Psicología y Ciencias de la Salud y Defensor del Menor en la Comunidad de Madrid durante cinco años, quien sostiene que la pandemia ha afectado a la salud mental de los ciudadanos “mucho más de lo que ellos creen” y se refiere a todo tipo de problemas derivados directa o indirectamente de ella: comportamientos obsesivos, ludopatía, alcoholismo y, por supuesto, trastornos alimenticios.
Tanto Figuera como él coinciden en muchos aspectos. Por ejemplo, en las consecuencias que ha tenido la covid, también en la salud mental de los sanitarios: “Tienen imágenes que vuelven de manera inoportuna, problemas para conciliar el sueño, ansiedad…”.
A renglón seguido, ambos se refieren a la necesidad de hablar sobre este lastre y normalizarlo para poder dejar atrás el estigma. El diputado de Más Madrid pide “visibilizarlo, dar cifras y hacer big data”. “Tenemos que demostrar que estamos hablando de algo que es una lacra y que hay muchísima gente que la sufre en soledad… Antes se decía que hablar del suicidio, por ejemplo, provocaba un efecto contagio. Se ha demostrado que esto no es así”, dice el director del Hospital de Día Ponzano, mientras pone en valor que el tema haya llegado al Congreso y agradece a famosos y medios de comunicación que se hagan eco de él.
Urra respalda que los problemas relacionados con salud mental han de tratarse con normalidad: “No pasa nada, igual que la mayoría de las personas van a tener que ir a un fisioterapeuta o van cada año al odontólogo, no pasa nada por acudir a un psicólogo o a un psiquiatra…”.
El tratamiento que se da todavía hoy a la salud mental no es el esperado por profesionales ni pacientes, pues aún es considerada un estigma en muchas ocasiones. Sin embargo, y aunque la pandemia ha evidenciado la lacra tan grande que supone lo relacionado con ella, hay un deseo unánime por parte de todos: que deje de tratarse como un problema menor.
