Un cura español fue detenido el pasado domingo en Maracaibo (Venezuela) tras ser sorprendido mientras abusaba sexualmente de una menor de 12 años en el interior de un vehículo estacionado en la vía pública.

Su nombre es Iván Merino Pedial y tiene 35 años. Según la Fiscalía, la víctima aseguró que el sacerdote abusaba de ella “desde hacía tres años”.

La archidiócesis de la zona le ha apartado de su cargo y ha condenado lo ocurrido, al tiempo que ha pedido perdón tanto a la menor como a sus familiares y “a toda la comunidad eclesial”. El propio arzobispo de Maracaibo, José Luis Azuaje, declaró en un comunicado que “se prohíbe al padre Iván Merino el ejercicio del ministerio sacerdotal en la Archidiócesis de Maracaibo".

Merino Pedial pertenecía a la Orden de los Agustinos Recoletos y era vicario de una parroquia en Maracaibo.

El sacerdote habría argumentado que “nos encariñamos, y una cosa llevó a la otra y sucedió eso, estábamos en el juego, en las caricias y una cosa llevó a la otra".

Según el secretario de Gobierno del Estado de Zulia, Lisandro Cabello, existen indicios de "otras violaciones y otras víctimas”, y añadió que "este señor tenía denuncias en España, esas cosas ya habían dado señales (...) Venía siendo señalado en una iglesia de España y lo mandaron castigado para acá". La Orden de los Agustinos lo ha negado.