Hoy había dos juicios en la Audiencia Nacional, ambos para pedir que se anulase la inscripción del seudosindicato de trabajadoras del sexo OTRAS. En el primero de ellos, la Fiscalía ha abogado claramente por oponerse a la inscripción de un sindicato hecho "en fraude de ley", dado reconocer la prostitución por cuenta ajena es lo mismo que reconocer el proxenetismo como actividad empresarial. Y el proxenetismo es delito. 

La defensa de OTRAS se ha basado en afirmar que solo pretenden "actuar en defensa" de las mujeres dedicadas a la industria pornográfica, entre otros sectores, y de sus derechos. Según ha manifestado su abogada, "constituirlo no es legalizar la prostitución", solo es "regularizar la actividad de este ejercicio" en beneficio de las trabajadoras por cuenta ajena. "No de prostitutas", ha matizado.

Sin embargo, las promotoras de OTRAS forman parte de una asociación llamada APROSEX (Asociación de Profesionales del Sexo) y reconocen abiertamente ejercer la prostitución. Entre las presentes hoy en la Audiencia Nacional, se encontraba Sabrina Michelle Rivera, cuyo seudónimo es Shirley McLaren, que reconoce en esa misma web, así como en sus diferentes perfiles en las redes sociales, ofrecer servicios de prostitución. Pero es que, según documentación a la que ha tenido acceso ElPlural.com, tanto Rivera, como otras promotoras de OTRAS, cobran una nómina como auxiliares administrativas en APROSEX, cobrando el salario mínimo y, por tanto, cotizando así a la Seguridad Social

Nómina aprosex

Por otro lado, APROSEX ofrece servicios más propios de una organización patronal, como pudiera ser una organización de autónomos, que de un sindicato, como cursos de formación para ejercer la prostitución o "cursos de inglés para putas". 

Ahora depende de los jueces determinar la legalidad de los estatutos de OTRAS que, según fuentes cercanas al caso, podría decidirse esta misma semana.