La Policía Nacional ha detenido este jueves a ocho jóvenes, siete de ellos menores de edad, acusados de agredir a vigilantes y otros empleados en un centro de primera acogida para menores extranjeros no acompañados ubicado en la Casa de Campo de Madrid. Este incidente violento se produjo a las 22:00 horas del lunes 18 de septiembre, aunque los conflictos comenzaron días antes, cuando se descubrieron objetos robados en una de las habitaciones del centro.
Los objetos en cuestión, que incluían relojes y teléfonos móviles, pertenecían a personas que habían aparcado sus autocaravanas en las inmediaciones del centro. Este hallazgo llevó a la detención de un menor relacionado con los robos, lo que desencadenó una serie de amenazas de muerte hacia la directora y la subdirectora del centro por parte de otros residentes.
La situación se agravó cuando los menores realizaron gestos amenazantes y simularon cortar el cuello, aumentando la tensión en el centro. El conflicto alcanzó su punto álgido cuando uno de los menores agredió a un empleado, lo que provocó la intervención de los vigilantes, quienes también fueron atacados. Ante la imposibilidad de controlar la situación, se solicitó refuerzos a la Policía Nacional.