La Policía Municipal de Madrid ha detectado en un bazar de alimentación en la calle Hortaleza (distrito Centro) un total de 1.964 productos caducados en sus expositores, por lo que ha denunciado a su propietario, un ciudadano chino, acusado de un delito contra la salud pública.

Los agentes, que realizaban un control por las restricciones sanitarias debido a la pandemia, entraron sobre las once de la noche en el local tras recibir una denuncia que advdertía de que el comerciante estaba vendiendo alcohol fuera del horario permitido. La actuación de los policías se enmarca dentro del dispositivo de vigilancia para evitar fiestas ilegales en viviendas.

Un presunto delito contra la salud pública

Los policías pidieron la documentación al propietario y se percataron de que la venta de bebida no era la única irregularidad. Fuentes policiales han dicho a ABC que había una cantidad elevada de alimentos caducados a la venta, dispuestos en los mostradores. Los agentes procedieron entonces a cursar una denuncia al comerciante.

El expediente abierto se ha puesto en conocimiento de la autoridad judicial por un presunto delito contra la salud pública, ya que se trataba de casi 2.000 productos que no podían consumirse.