El Papa ha reivindicado a la mujer, cuyo cuerpo se sacrifica en "altares profanos" como la publicidad, el lucro o la pornografía, y ha denunciado que la maternidad es continuamente "humillada" por una sociedad que sólo busca el "crecimiento económico".

"Cuántas veces el cuerpo de la mujer se sacrifica en los altares profanos de la publicidad, del lucro, de la pornografía, explotado como un terreno para utilizar. Debe ser liberado del consumismo, debe ser respetado y honrado. Es la carne más noble del mundo, pues concibió y dio a luz al Amor que nos ha salvado", ha denunciado el Pontífice.

Francisco ha defendido que la humanidad debería poner en el centro a las mujeres porque son "fuente de vida" y que, en cambio, son continuamente "ofendidas, golpeadas, violadas, inducidas a prostituirse y a eliminar la vida que llevan en el vientre".

"Toda violencia infligida a la mujer es una profanación de Dios, nacido de una mujer. La salvación para la humanidad vino del cuerpo de una mujer: de cómo tratamos el cuerpo de la mujer comprendemos nuestro nivel de humanidad", ha lamentado. Por ello, ha pedido que el cuerpo de la mujer sea "liberado del consumismo", y por tanto "respetado y honrado".

El origen de los conflictos

Francisco ha realizado estas consideraciones durante la homilía de la Misa que ha celebrado este primer día del año, cuando la Iglesia celebra la 53 Jornada Mundial de la Paz que abre el 2020 con la denuncia de que las guerras comienzan "por la intolerancia a la diversidad del otro, que fomenta el deseo de posesión y la voluntad de dominio". En el texto que dirige a los jefes de Estado y de gobierno de todo el mundo, el Papa sitúa el origen de los conflictos en "el odio que instiga a destruir, a encerrar al otro en una imagen negativa, a excluirlo y eliminarlo".

El Pontífice también ha hecho hincapié en uno de los temas que han definido su pontificado: los flujos migratorios. En este sentido, ha lamentado que haya madres que se "arriesgan a emprender viajes penosos para tratar desesperadamente de dar un futuro mejor al fruto de sus entrañas, y que son consideradas como números que sobrexceden el cupo por personas que tienen el estómago lleno, pero de cosas, y el corazón vacío de amor". Francisco ha invitado a los fieles a mirar con el corazón porque solo así se ve a la persona "más allá de sus errores, al hermano más allá de sus fragilidades, la esperanza en medio de las dificultades".

Para el Papa, está claro que para lograr un mundo mejor, que "sea una casa de paz y no un patio de batalla", es necesario poner la dignidad de toda mujer en el centro. "La mujer es donante y mediadora de paz y debe ser completamente involucrada en los procesos de toma de decisiones. Porque cuando las mujeres pueden transmitir sus dones, el mundo se encuentra más unido y más en paz. Por lo tanto, una conquista para la mujer es una conquista para toda la humanidad", ha señalado.

Finalmente, el obispo de Roma ha declarado que "la Iglesia tiene el corazón de una madre" y que, por tanto, es imposible entenderla si se mira solo a "sus estructuras, programas y tendencias". "El enemigo de la naturaleza humana, el diablo, trata de dividirla, poniendo en primer plano las diferencias, las ideologías, los pensamientos partidistas y los bandos", ha concluido.

El manotazo del Papa a una mujer en la Plaza San Pedro

El Papa protagonizó tras su anterior misa, la última de 2019, el martes pasado, un incidente que captaron las cámaras de todo el mundo, cuando saludaba a los fieles en la Plaza San Pedro de El Vaticano. La visceral reacción del Sumo Pontífice quien, después de que una mujer le agarrara la mano y tratara de arrastrarle hasta ella con brusquedad, la golpeó visiblemente enfadado, ha dado mucho de qué hablar.

"Yo mismo pierdo la paciencia y, por eso pido disculpas por el mal ejemplo de ayer",dijo el Pontífice sobre su gesto.