El Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas recibió 1.356.383 de viajeros durante todo el mes de agosto. Una cifra de usuarios menor a la que se alcanza diariamente en el Metro de Madrid. Según ha informado el consejero de Transportes de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido, el Metro de Madrid acoge 1,8 millones de viajes diarios.

El cierre de algunas fronteras fuera de España y la obligatoria cuarentena de algunas ciudades europeas a los viajeros españoles puede ser uno de los principales motivos de la bajada de usuarios. Pero también tiene que ver la reducción de aforo en los propios aeropuertos de España. Barajas, como el resto de las zonas aeroportuarias españolas, no permite la entrada de familiares con los pasajeros.

Como ha sido costumbre hasta ahora, los pasajeros que llegaban a Barajas o se marchaban de la ciudad solían estar acompañados por sus familiares. Con la pandemia, la crisis del coronavirus ha obligado a que el acceso sea de forma única para todos los viajeros que tengan billete de avión, salvo excepciones de asistencia obligatoria. De esta manera, se evita la congregación de personas que no van a viajar y así apostar por un espacio mayor para las salidas y llegadas de pasajeros.

El vicepresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio Aguado, aseguraba en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno a ElPlural.com, en relación con la preocupación por la falta de seguridad en el Metro de Madrid, que "no por mucho que se repita una mentira, se convertirá en una verdad. Me niego a aceptar mentiras que están generando alarma en los madrileños". Una advertencia a la ciudadanía que sí realiza con Barajas a pesar de que la afluencia de viajeros es menor que la que acoge cada día el Metro y solamente se ha detectado un positivo en coronavirus en el mes de septiembre.

El Gobierno de la Comunidad de Madrid lleva criticando al Gobierno de España por la gestión de Barajas desde el fin del estado de alarma. Desde el pasado mes de junio, Isabel Díaz Ayuso y Aguado han reprochado públicamente la falta de gestión, a pesar de que las distancias entre viajeros son mucho mayores que las que tienen los usuarios del Metro y a ello hay que añadirle que en el transporte público madrileño no hay medidas de control y prevención, algo que en Barajas se instauró con el fin del estado de alarma.

El vicepresidente regional pidió a los medios no alarmar a la ciudadanía y “no contar mentiras ni mantras” con las que se cuestiona las herramientas de seguridad del Metro de Madrid. Pero, Aguado no duda en seguir con su discurso de que Barajas “ha sido y sigue siendo un coladero” a pesar de que los datos reflejan que si el Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas produce contagiados y nuevos brotes, el Metro de Madrid debería causar, como mínimo, una incidencia similar, aunque asegura que “no ha habido ningún contagiado en el Metro”.