Ángel Prenda, uno de los cinco componentes de La Manada condenados por un delito de abuso sexual a una joven en los Sanfermines de 2016, ha visto como en apenas un par de días se cerraba el club de fans abierto para apoyarle en Facebook. Algo que no le ha gustado nada.

Este viernes, a su salida de la obligatoria visita a los juzgados de Sevilla, a preguntas de los reporteros que lo esperaban en la puerta, se ha mostrado “muy agradecido” a los que han formado parte de este grupo, aunque que se haya cerrado “en dos días” considera que es “la viva imagen de la democracia de este país”. “Dura menos el club de fans que Pablo Iglesias en un barrio obrero”, ha dicho en tono jocoso el conocido como El Prenda.

Él, así como el militar Antonio Jesús Cabezuelo, el guardia civil Antonio Manuel Guerrero, Angel Boza y Jesús Escudero deben acudir dos veces por semana ante la justicia después de ser puestos en libertad tras dos años de prisión preventiva y a la espera de que el Tribunal Supremo decida sobre los recursos ante la polémica sentencia del tribunal de Navarra que los condenó por abuso sexual.

No ha sido una semana de malas noticias, en comparación, para los integrantes de La Manada. Además de este grupo de apoyo que le salió a El Prenda, el militar Antonio Jesús Cabezuela recibió hace pocos días la notificación de que se levantaba su suspensión en el Ejercito, aunque el Ministerio de Defensa ya avisó de que no le asignaría ningún destino.