Saber inglés es la herramienta número uno para cualquier desarrollo laboral y personal. ¿Por qué? Simplemente porque es el lenguaje universal, tanto que muchos de sus vocablos se han incorporado en el uso cotidiano de muchos países, como el nuestro. Esto ocurre en particular con los términos de la informática, pero también con lo de la economía, la ciencias, la investigación, y muchos otros ámbitos en donde los españoles a lo largo de los años hemos ido adoptando palabras (como bistec, cóctel o champú) o hemos comenzado a utilizarlas tal y como son en la lengua anglosajona (como marketing, trendy o lunch).
De uno u otro modo, ya sea para completar la enseñanza en la escuela, para planificar un viaje o para desarrollarnos laboralmente, conocer y dominar el inglés es fundamental y para eso contamos con academias de inglés en Madrid que nos acompañan en este trayecto.
Estudiar inglés sirve no sólo a nivel escolar o laboral; posibilita el acceso a otros mundos y otras culturas, otros estilos de vida y diferentes formas de pensar. Viajar es una de la mejores formas de ampliar los propios horizontes, personales y culturales, y el inglés es la llave maestra que abre todas las puertas. Y por supuesto que es fundamental para la informática en general y para internet en particular; tanto para acceder a determinadas web como para realizar tareas cotidianas en el ordenador, el inglés es imprescindible.
¿Qué niveles de la lengua se pueden estudiar en una academia de inglés? Pues todos. Antes de apuntarse en un curso, lo usual es pasar por un examen de nivel para determinar exactamente nuestro conocimiento del momento y luego, en base a nuestras necesidades (personales, laborales, etc) determinar cuál o cuáles son los mejores cursos a seguir, y también su modalidad: particular, a domicilio, clases grupales, etc.
Las clases de inglés dirigidas a los niños pueden ser impartidas tanto en la academia como en la escuela, y suelen abarcar las temáticas propias de alumnos de Primaria, ESO y Bachillerato. Es ideal que los niños aprendan idiomas, y cuanto antes puedan comenzar, mejor es; la mente de un niño es como una esponja, pudiendo no sólo incorporar conceptos más rápido que un adulto, sino integrarlos en su vida cotidiana como una herramienta natural. Los cursos de inglés para niños suelen acompañarse de juegos interactivos, juegos físicos, canciones, rimas y actividades especialmente desarrolladas para el aprendizaje durante la infancia.
Los grupos suelen dividirse por edades, con niños de 3 a 6 años, donde predominan las clases alegres y por sobre todo lúdicas; un segundo grupo con niños de 7 a 12 años, donde se acompañan contenidos de la escuela primaria y el enfoque está centrado en que aprendan a comunicarse sin necesidad de traducir en su lengua nativa. Y el grupo de jóvenes, de los 13 a los 18 años, comprende clases orientadas a mejorar y perfeccionar la capacidad de los jóvenes para comunicarse en inglés de manera natural. En estas etapas es cuando se puede conseguir un nivel bilingüe en el uso del segundo idioma.
Las clases que ofrecen las academias pueden estar orientadas, además, a la preparación específica de los exámenes oficiales, que en el caso del idioma inglés son, entre muchos otros exámenes, el First Certificate, CAE, TOEFL, IELTS, PET, B1, EOI. Esos exámenes de tipo oficial, con la obtención de títulos en inglés, demuestran y certifican el dominio del idioma facilitando la futura incorporación al mercado laboral.
En cuanto a la empresas: los cursos especialmente dirigidos a la empresas suelen estar impartidos por profesores nativos, ya sea en clases grupales o individuales. El Business English esté especialmente enfocado en el uso de aquellos términos que se necesitan en el ámbito cotidiano de los negocios y la comunicación o negocios. Lo interesante de estos cursos es que por lo general se pueden tomar sin salir de la oficina, pudiendo elegir el número de horas y los días que mejor se adapten a nuestra empresa. Los niveles van desde principiantes hasta avanzados, y por supuesto cambia el contenido de los cursos en base al nivel y tipo de cursos que puede ser intensivo, extensivo o específico.
¿Por qué es tan importante el inglés para las empresas? Porque nuestro mundo laboral es cada vez más competitivo y el global nos ha abierto infinidad de puertas y mercados, a los que no podremos acceder (ni negociar, ni comerciar) si no podemos comunicarnos. Las empresas demandan cada vez más contar con personal altamente cualificado y entre esas calificaciones, el conocimiento o dominio de idiomas, particularmente el inglés, está a la cabeza. Esto se nota particularmente en la comunidad de Madrid pues es una de las zonas con tejido productivo más internacional.
