Jurgen Klopp, entrenador del Liverpool y reciente campeón de Europa con el conjunto inglés, nunca ha ocultado su ideología política. En una entrevista para el diario aleman Taz, declaró abiertamente que "soy de los que creen en el estado de bienestar, y por ello jamás pagaré un seguro privado de salud ni apoyaré a un partido porque prometa bajar los impuestos". Además, quiso dejar bien claro su posicionamiento político: "Si hay algo que jamás haré en mi vida será votar a la derecha",.

A través de su carrera como entrenador ha conseguido plasmar esa idea vital en hechos. Jurgen Klopp se hizo un nombre como director técnico gracias a su papel al frente del Borussia de Dortmund. Un equipo de una ciudad obrera, al igual que Liverpool, su actual equipo.

Ambos conjuntos cuentan con una masa social marcada por la fuerte presencia de la working class y por tener en frente equipos más ricos y con un origen más pudiente, como el Bayern de Munich o Chelsea. En ambas ligas ha conseguido demostrar cómo, a través de un fútbol basado en la velocidad, la generosidad entre jugadores y el sacrificio por tu compañero, también se puede vencer al que a priori, es más fuerte que tú.

Además, se trata de un hombre de gran carisma y una capacidad innata para conectar con sus jugadores e hinchas. "Tengo uno de esos síndromes de querer ayudar siempre a los demás, me preocupo mucho por ellos y me siento responsable prácticamente de todo", dijo en una entrevista para The Guardian. 

Klopp también ha criticado el Brexit: "No soy la persona mejor informada del mundo pero me interesa mucho el tema. Sí, puede pasar que la gente vote por un 51% cambiar todo un país pero ¡venga ya!, vamos a pensarlo todos de nuevo y a votar otra vez con información verídica, no la que rodeó a la campaña del referéndum".

Asimismo el alemán añadió: "Hay quienes dicen que no lo notan, pero yo lo siento constantemente. Por ejemplo en la libra, que ahora la gente se queja porque dice que irse de vacaciones a España es muy caro y no, lo cierto es que la divisa ya no es tan fuerte. Vale, la Unión Europea no es perfecta, pero es la mejor idea que hemos tenido. No ha habido ni un solo episodio en la historia en el que la división conduzca al éxito, por lo que, para mí, el Brexit no tiene ningún sentido".