El Ayuntamiento de As Neves, en Pontevedra, ha declarado tres días de luto oficial, desde este jueves hasta el sábado, tras el fallecimiento de Irene Rodríguez, una mujer de 60 años, presuntamente asesinada por su hijo menor, A.C.R., de 20 años. Los lamentables hechos tuvieron lugar alrededor de las 21.20 horas del pasado miércoles en su domicilio situado en la parroquia de Rubiós. Según informaciones, el joven habría atacado a su madre con un cuchillo en la entrada de la vivienda, causándole la muerte inmediata.
Tras el incidente, el presunto autor se encerró en su habitación, donde fue detenido por los agentes y trasladado al Hospital Álvaro Cunqueiro debido a algunas lesiones que presentaba. Este jueves, a las 12.00 horas, decenas de personas se congregaron frente al Ayuntamiento de As Neves para guardar un minuto de silencio en memoria de la víctima.
Durante el acto, el alcalde, José Manuel Alfonso González (PP), expresó su profundo pesar por los sucesos, destacando que Irene era muy conocida en el pueblo, especialmente por su larga trayectoria como cartera local. El alcalde hizo un llamamiento a la "precaución" a la hora de señalar a una persona, haciendo referencia a los problemas de salud mental del detenido, quien estaba bajo tratamiento médico.
"Desde las autoridades debemos enfocarnos en las enfermedades mentales, especialmente entre los jóvenes", afirmó el alcalde, subrayando la necesidad de proporcionar las herramientas adecuadas para su superación. A pesar de la tragedia, se señaló que no había denuncias previas de malos tratos en la familia, aunque algunos vecinos mencionaron discusiones esporádicas entre madre e hijo.
As Neves decreta luto oficial tras el presunto parricidio de Irene Rodríguez
Un día marcado por "el dolor y la consternación", así lo describió el alcalde, quien fue informado de los hechos la noche anterior y se personó en el lugar después de las 22.00 horas. Los vecinos de As Neves también expresaron su dolor durante el minuto de silencio, recordando a Irene como una persona amable que había solicitado una excedencia para cuidar de su madre anciana.
Irene, quien estaba soltera, tenía dos hijos de 25 y 20 años. El menor, con problemas de salud mental documentados, es el presunto responsable de su muerte. Se espera que el joven sea puesto a disposición judicial este viernes en el Juzgado de guardia de Ponteareas.
