El primer ministro de Italia, Giuseppe Conte, ha anunciado este jueves a última hora que se han registrado en el país los dos primeros casos del nuevo coronavirus chino, que se ha saldado por el momento con 213 muertos en el gigante asiático, epicentro del brote.

Los dos afectados son dos turistas chinos que se encuentran actualmente aislados en el hospital Spallanzani de Roma, la capital italiana, según ha informado el diario local Corriere della Sera. Tal y como indican fuentes médicas, ambos se encuentran en "buen estado".

"También esperábamos casos en Italia", ha manifestado el ministro de Sanidad, Roberto Speranza, durante una rueda de prensa en la que ha informado de la puesta en marcha de medidas preventivas. "La situación es grave pero no hay necesidad de alarmarse, está completamente bajo control", ha aseverado.

Racismo en Italia

El incoveniente procede del aumento del racismo en Italia con los ciudadanos procedentes de China. Como el nuevo brote del coronavirus se ha generado en la ciudad china de Wuhan, algunos italianos están tratando a los asiáticos con los que se cruzan por la calle con discriminación.

Ciudadanos chinos han denunciado insultos y amenazas por una psicosis generada a través del brote del nuevo virus.

Tal es el racismo que ha salido a la luz tras estos casos de alerta que un joven de 13 años, con nacionalidad italochina, tuvo que salir de un campo de fútbol entre lágrimas por culpa de las increpancias de los allí presentes dado que aseguraban que el menor tenía el coronavirus.

Una alerta generada por los propios ciudadanos italianos que está afectando directamente a las personas de origen chino que viajan o residen a las ciudades del país. 

Prevenciones en Italia

El Gobierno, que ha asegurado que las medidas de prevención serán decididas durante el Consejo de Ministros previsto para este viernes por la mañana, ha decidido, además, suspender los vuelos entre Italia y China.

Las palabras de Conte han tenido lugar poco después de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) declarara el brote de nuevo coronavirus como una emergencia sanitaria internacional y especificara que el "principal motivo de tomar la decisión no es lo que está pasando en China, sino lo que está pasando en otros países".

En Italia se encuentra a su vez un crucero procedente de España con unas 6.000 personas a bordo, que han sido puestas en cuarentena en el puerto de Civitavecchia, cerca de Roma, debido a un posible caso de coronavirus en una pasajera.

No obstante, el Ministerio de Sanidad de Italia ha aclarado que las pruebas iniciales realizadas a la pasajera del crucero que se encuentra en cuarentena han resultado negativas.

Los temores por el contagio del coronavirus han provocado que navieras como MSC o Royal Caribbean hayan decidido suspender provisionalmente los itinerarios por el país asiático.