La Asociación Plataforma por la Dignidad de las Personas Mayores en Residencias (PLADIGMARE) junto a la Coordinadora del Tercer Sector de la Comunidad de Madrid presentaron recientemente la campaña ‘Voces Silenciadas’ con el objetivo de homenajear y dar voz a aquellas personas mayores que han fallecido en las residencias durante la pandemia.

También han exigido a la Comunidad de Madrid una serie de criterios para mejorar el funcionamiento en las residencias, aunque han denunciado la falta de compromiso de la administración regional. PLADIGMARE ha mantenido una reunión con el Consejero de Políticas Sociales de la Comunidad de Madrid para abordar la crisis que se ha vivido en los centros de mayores.

En primer lugar, han pedido explicaciones por la suspensión de las visitas de familiares en 52 residencias, 16 de las cuales no han registrado ningún contagio por coronavirus. Para evitar la tragedia vivida en los peores meses de la pandemia, los familiares de residentes han planteado que se intervengan aquellos centros en los que se han suspendido las visitas porque no sean capaces de controlar el virus, por ello le han preguntado si se plantean cumplir su propia orden en relación con las residencias, a lo que no han obtenido respuesta.

Desde la asociación no se muestran en contra de restringir las visitas como medida para superar la pandemia, pero exigen que estas decisiones se tomen con criterios objetivos y pensando en el bienestar de los mayores. Aunque insisten en que para mejorar la situación en las residencias hay que incrementar las plantillas de personal de forma inmediata y añadir una formación específica sobre pandemias a los trabajadores de este tipo de centros.

Instan a establecer unas ratios más acordes con las necesidades de los ancianos que, mientras la Ley de Dependencia lo ha fijado en 0,47 como mínimo, en la Comunidad de Madrid se ha establecido en 0,35. Por otra parte, insisten en la necesidad de una formación específica y el uso de material de protección para todos los trabajadores, que denuncian que se ha producido una reducción del mismo.

Finalmente, la plataforma por la dignidad de los mayores razona que la mejor solución para acabar con el negocio de las residencias y el perjuicio que ello conlleva en la atención de los ancianos radica en devolver la gestión pública a todas las residencias de titularidad pública y gestión privada. Para ello explican que una forma de hacerlo es, una vez se van finalizando los contratos con las empresas privadas, no se vayan prorrogando. Ante esta iniciativa no han obtenido respuesta por parte del equipo de Díaz Ayuso.