Un fallo informático es el que pone ahora nuevas trabas en la concesión del complemento de las becas comedor de la Comunidad de Madrid. A falta de dos meses para que finalice el curso escolar 2023/2024, las familias que solicitaron esta ayuda siguen esperándola para poder costearse los gastos.
La directora general de servicios sociales y atención a la discapacidad, María de la Consolación Alfaro, ha detallado que el retraso parte de un problema con la aplicación GUAY (Gestión Unificada de Ayudas) de la Comunidad de Madrid, pero ha asegurado que “tan pronto como se solucione se continuará con el proceso de asignación”.
Según ha podido informar, la Comunidad de Madrid dispone de este dinero desde el mes de diciembre cuando se realizó la primera de las transferencias por parte del Ayuntamiento. “La primera se ha realizado el 4 de diciembre de 2023, por 2.800.000 euros. La segunda se ha realizado el 22 de enero de 2024, por 4.235.000 euros”.
Precisamente en esta línea, ha intervenido Lucía Lois, concejala de Más Madrid, durante la comisión de Políticas Sociales, Familia e Igualdad celebrada este lunes, quien ha denunciado que, a pesar de disponer de la cuantía destinada a estas ayudas, los centros educativos no hayan recibido todavía “ni un euro de los 7 millones que el Ayuntamiento ha transferido a la Comunidad de Madrid”.
En la misma línea, se ha mostrado tajante con el supuesto problema informático alegando que no es la primera vez que se producen estos incidentes técnicos y que la aplicación GUAY “lleva meses caído y sin funcionar”. Se ha dirigido asimismo a la bancada popular para reprochar la falta de compromiso con las familias señalando que el Partido Popular “es incapaz de garantizar los cinco euros al día que cuesta una comida saludable para los niños madrileños”, lo que ha aprovechado para hacer un alegato a favor de un servicio de comedor gratuito: “la mejor manera de garantizar la alimentación de nuestros niños es el comedor universal gratuito”.
Una traba que ahora es de carácter informático, pero que, en septiembre, coincidiendo con el inicio del curso, fue de carácter burocrático. En un intento por subsanar las incidencias y los retrasos que se produjeron, el consejero de Educación, Ciencia y Universidades, Emilio Viciana, informó que el gobierno de la Comunidad de Madrid había acordado “flexibilizar estas ayudas” de manera que todos los alumnos que habían solicitado la ayuda serían beneficiarios de ella.
Asimismo, Viciana adelantó que iban a llevar a cabo una modificación en el sistema de concesión de becas de cara a los próximos cursos con el objetivo de evitar que estos problemas se volviesen a producir. “Estamos trabajando ya para diseñar un nuevo sistema que sea mucho más sencillo para las familias y para los centros, para que una circunstancia así no se produzca de nuevo”.
Valoración nefasta del PSOE
Esto, a modo de solución rápida y transitoria, tal y como señalaron desde el propio consejo de Gobierno, supuso que no se atendieran determinados criterios como el nivel de renta a la hora de conceder la ayuda. Desde el grupo socialista en la Asamblea de Madrid, encabezado por Juan Lobato, criticaron esta gestión tildándola de “caos y chapuza absoluta”. El portavoz y secretario general del PSOE-M remarcó que con esta medida no importaba que el beneficiario gane 150.000 euros o 10.000 euros, o si cumplen o no los requisitos.
Además, desde la Consejería se solicitó a los centros escolares que asumieran los gastos del comedor hasta que se pudieran resolver las ayudas correspondientes. A pesar de que se escudaron alegando que el objetivo era que “ningún niño se quedase sin la beca comedor”, desde Comisiones Obreras señalaron una creciente preocupación en los centros, que podrían hacer frente a este coste durante uno o dos meses, pero no de manera definitiva.
Al margen de esto, no solo se retrasaron con la concesión de estas becas, sino que aumentaron también el precio del menú, que pasó de los 4,88 euros a los 5,50 euros.
Tipos de ayudas
Entre las ayudas que ofrece la Comunidad de Madrid, se distinguen tres tipos: por una parte, las que cubren la totalidad de la beca comedor; las que becan a la familia con 800 euros mensuales y que reduce el precio del comedor a un euro al día; y las ayudas de 445 euros mensuales que reducen el coste hasta tres euros diarios. En líneas generales, estas ayudas se adjudican teniendo en cuenta la renta u otros factores, algo que este curso no se ha visto reflejado y que, a dos meses que se cierren las aulas, las ayudas que buscaban que ningún niño se quedara sin la beca, siguen pendientes.
