Una toxiinfección alimentaria ha causado 44 afectados y una persona fallecida en Córdoba. Se trata del consumo de un montadito de pringá en una taberna de la provincia andaluza, según informó la Delegación Territorial de Salud y Consumo de la Junta de Andalucía.

Con los datos actuales que han trascendido, Salud ha confirmado estos 44 casos, “de los que sólo tres acudieron a los servicios sanitarios con los siguientes resultados: dos coprocultivos negativos y un hemocultivo negativo del caso fallecido”, siendo el periodo de incubación de doce horas y “el alimento sospechoso un montadito de pringá, pues fue el único consumido por todos los afectados”.

Para investigar exhaustivamente las causas, la Delegación de Salud ha procedido a la inspección del local, así como a “la toma de muestras de testigos de alimentos existentes en el establecimiento y al seguimiento y encuesta de todos los casos”.

Las mismas fuentes de la Junta de Andalucía han añadido que "el agente sospechoso es el E. Coli y Clostridium perfringens y las muestras alimentarias están en estudio. También se está estudiando a los manipuladores en curso, sin haber enfermos", mientras continúan "las actuaciones en el establecimiento, con las personas afectadas y los productos sospechosos".

Piden que la Fiscalía investigue

Debido al grave impacto que ha tenido esta intoxicación alimentaria, la asociación El Defensor del Paciente ha pedido a la Fiscalía de Córdoba que abra una investigación de oficio por este “grave” suceso, aunque "sin que se haya podido confirmar que la causa sea el consumo de los alimentos relacionados con el brote".

De esta manera, la asociación se ha pronunciado a través de una nota en la que han pedido "por la gravedad y mediando un fallecimiento una investigación de oficio para conocer los controles que ha tenido esta empresa por parte de la Junta de Andalucía y qué materia comestible se ha utilizado para crear una intoxicación de esta índole": "Es imposible que se desconozcan los alimentos que se han consumido y en qué estado estaban, dónde han sido conservados y adquiridos", han expresado, para demandar también los resultados de "la propia autopsia de la víctima fallecida".

Según han insistido, "los derechos de los consumidores y usuarios serán protegidos prioritariamente cuando guarden relación directa con productos o servicios de uso o consumo común, ordinario y generalizado con grave daño para su salud".

Por otra parte, la solicitud al Ministerio Público de Córdoba la fundamentan en que "el artículo 262 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal obliga a los que por su cargo, profesión u oficio tuvieren noticia de algún delito público a denunciarlo inmediatamente al juez o al fiscal". Así, esperan que "se esclarezcan los motivos de la intoxicación y la depuración de responsabilidades".

Bajo el mismo marco, la asociación de consumidores Facua también se ha pronunciado al respecto, reclamando así a la Consejería de Salud y Consumo del Gobierno andaluz que aclare “cuáles son la marca y fabricante” del alimento que ha provocado la intoxicación de 44 personas y el fallecimiento de otra, “así como el establecimiento donde se distribuyó y cualquier otro dato que sirva para la identificación de los ingredientes de la serie de montaditos de pringá”, insistiendo en que la administración andaluza sólo ha confirmado el número de afectados y no ha aclarado definitivamente de dónde partió la intoxicación.

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