La posibilidad de un segundo confinamiento está minando el ánimo de muchos españoles. Sin embargo, eso no es nada si lo comparamos con la desesperación con la que el sector sanitario ven aumentar los casos de contagios. 

Hace meses que se lleva alertando del delicado estado psicológico con el que los profesionales sanitarios afrontarían una segunda ola. Ahora que ya está aquí esa segunda embestida de la pandemia, el trabajo se presenta como una auténtica pesadilla para aquellos que se sitúan en la primera línea del frente de batalla. Nada ayuda la dejadez de estos últimos meses de calma en los que administraciones como la de Isabel Díaz Ayuso no han dotado a hospitales y centros de salud con los recursos económicos o de personal necesarios para afrontar la situación con ciertos mínimos. 

Elsa Cabello es una de esas personas normales que no se sienten preparadas para volver a actuar como héroes. Esta enfermera de la Comunidad de Madrid ha estallado en Twitter, asegurando que ya ha llegado a su límite: "En dos días me incorporo y no quiero ir. El trabajo de mi vida, mi pasión, la enfermería... 20 años trabajando y nunca me había pasado. Siento tristeza, rabia, impotencia. Los sanitarios estamos dejados de la mano de @IdiazAyuso".

Una desesperación ignorada por la Administración regional pero para la que, al menos, la ciudadanía ha respondido masivamente en redes mandando cientos de mensajes de apoyo y ánimo a Elsa. La enfermera, tan sólo un ejemplo de su sector, ha agradecido enormemente esos apoyos que, por ahora, le permitirán sacar fuerzas de flaqueza.