La desaparición esta semana en Níjar de Gabriel, un niño de ocho años, ha vuelto a reabrir el debate sobre el papel que juegan los medios de comunicación en este tipo de casos y las informaciones que se publican. Este mismo viernes, la familia y el propio Ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, pedían cautela, después de que entrasen en circulación distintos bulos sobre el caso

La Guardia Civil tuvo que desmentir que el padre del pequeño hubiese sido detenido como principal sospechoso del caso, y la madre de Gabriel se vio obligada a aclarar que su relación con su pareja era buena, al conocer que se había publicado que no se hablaban. 

Otros casos polémicos

Pero no es la primera vez que una familia afectada por una desaparición se ve envuelta en una especie de 'reality show'. Ocurrió recientemente con el entorno de Diana Quer, que se convirtió en diana de elucubraciones sobre amores, vacaciones y broncas públicas. Desde Eduardo Inda hasta Ana Rosa Quintana, pasando por El Mundo, publicaron desafortunadas informaciones sobre el caso. 

Unos años antes, también los padres de Marta del Castillo tuvieron que hacer frente a informaciones falsas o poco rigurosas. 

La policía recuerda que este tipo de bulos, además del daño que provocan a la familia, ralentizan y entorpecen las investigaciones, por lo que piden prudencia y responsabilidad