Parece que se lo hubiera tragado la tierra. Apenas tenía que recorrer 100 metros, pero nunca llegó a completar ese breve trayecto. Entre familiares, vecinos voluntarios y policías, son más de 200 personas las que buscan en la comarca de Níjar al pequeño Gabriel, que el martes hacia las tres y media de la tarde salió a jugar a la casa de un vecino, ubicada a unos 100 metros de la vivienda de su abuela, en la zona del cortijo La Molina.
Nadie ha vuelto a verlo. Nadie vio ni oyó nada. ¿Se extravió por su cuenta? Es la hipótesis principal que baraja la Guardia Civil.
A lo largo del día de ayer hubo batidas de búsqueda, con sistemas de localización GPS, drones, un helcóptero, perros especializados... Estuvieron peinando las montañas que rodean la zona de Hortichuelas, pero sin resultados positivos.
“Solo le pido a mi niño que sea fuerte, que aguante que lo estamos buscando, que aguante un poco que lo vamos a encontrar". Fue el desgarrador mensaje que enviaba ayer el padre del niño.
Un familiar del menor avisó de la desaparición al 112 en torno a las 20,10 horas de este martes, e informó de que el niño había sido visto por última vez en el cortijo La Molina. Por su parte, SOS Desaparecidos ha informado de que, en el momento de la desaparición, el menor llevaba un pantalón negro Adidas con rayas blancas y una chaqueta roja con capucha.
