La Policía Nacional ha detenido este miércoles a un joven como presunto autor del asesinato del canónigo Don Alfonso López Benito, cuyo cuerpo sin vida fue hallado en su residencia el pasado martes en extrañas circunstancias.

Según fuentes policiales, el sospechoso mantenía encuentros sexuales con el canónigo de manera continuada. El arrestado se encuentra actualmente bajo custodia policial, imputado por presunto asesinato y robo, al haber sustraído el teléfono de la víctima y enviado mensajes para simular que seguía con vida.

Hace unos días, el padre Alfonso, conocido en círculos eclesiásticos, había comunicado días atrás a su entorno que se ausentaría temporalmente debido a asuntos privados a resolver durante un viaje. Sin embargo, su repentina desaparición pasó inadvertida hasta que un amigo, preocupado por la falta de respuesta a sus llamadas, solicitó al portero del inmueble que accediera a la residencia del canónigo, ubicada en la calle Avellanas 22, en pleno corazón de la capital valenciana.

El Arzobispado de Valencia, al tener conocimiento de la tragedia, se ha puesto a disposición de las autoridades con el fin de colaborar en la investigación y esclarecimiento de los hechos. La ausencia del padre Alfonso fue notoria incluso durante la procesión en honor a San Vicente Mártir, patrono de la ciudad, celebrada el lunes, a la cual asistía puntualmente cada año. La autopsia sugiere que el canónigo pudo haber fallecido por estrangulamiento en la madrugada de San Vicente Mártir.

Robo o chantaje

El sospechoso, de nacionalidad extranjera, habría mantenido encuentros sexuales continuados con el sacerdote y fue apresado por el grupo de Homicidios por el rastro que dejó su teléfono.

Los agentes del grupo de Homicidios de la Brigada de la Policía Judicial de Valencia investigaron si el sacerdote había sido estrangulado y las sospechas se centraron en su entorno ya que ni la puerta de la portería ni la de su vivienda estaban forzadas.

Además, en la casa no había signos de estar revuelta ni había marcas en la puerta de entrada, por lo que inicialmente se descartó que se tratara de un robo con fuerza. No obstante, la investigación no descartó ninguna hipótesis dado que la víctima era un anciano muy confiado.