La Policía Nacional en colaboración con los Mossos d’Esquadra han desmantelado este miércoles el taller de fabricación de monedas falsas de 2 euros más importante de Europa en los últimos diez años. La fábrica se encontraba en España, localizada en el municipio de Villacañas (Toledo) y estaba hasta el momento gestionada por una red de ciudadanos de origen chino que operaban desde 2018 falsificando monedas de esta cantidad. Según las autoridades, se calcula que desde entonces este entramado ha puesto en circulación en el mercado español unas 100.000 unidades de dinero falso, y 400.000 en Europa. Tres de los diez detenidos se encuentran ahora en prisión provisional.

La operación policial, llevado a cabo este miércoles ha desmantelado la nave industrial donde tenía lugar la actividad ilegal. Allí se encontraban dos máquinas con la capacidad de producir entre 900 y 1.000 monedas falsas al día, que según han desvelado algunos agentes implicados en la investigación, habían sido movidas por distintos sitios de España durante lo últimos cinco años. Los últimos dos de ellos, Fuenlabrada (Madrid) y Barcelona.

La red circulaba las monedas falsas de esta manera

Las autoridades también han explicado cuál era la manera de operar de la trama. Víctor de las Heras, responsable de la Brigada de Extranjería de la Jefatura Superior de Madrid, ha desvelado que la organización ilegal en primer lugar producía las monedas falsas con las máquinas de las que disponían en la nave industrial, para después distribuirlas de distintas formas. Según han podido informar las autoridades, los dos métodos principales eran a través de la venta directa a otros ciudadanos chinos o en máquinas de salones de juego, donde la red sustituía las monedas de verdad por las falsificadas.

De las Heras también ha asegurado que el dinero falso que distribuía la red era de una gran calidad y que los materiales utilizados en el anillo y el núcleo de las monedas procedía de diferentes países como Portugal. El responsable de la Brigada de Extranjería ha destacado que al venir de diversos lugares y tratarse aparentemente de “dos piezas metálicas normales” no levantaban sospechas ante las autoridades. la organización era muy cuidadosa con su modus operandi. Una vez que distribuían las monedas falsas, dejaban de fabricar durante un tiempo, algo que les mantenía en un perfil bajo y despistó a las autoridades. Por su parte, la investigación policial comenzó en el año 2021, gracias a la denuncia de que un ciudadano de origen chino que alquilaba un local en Barcelona podría estar traficando con monedas falsas. Si embargo, la organización era muy cuidadosa con su modus operandi, y una vez que distribuían las monedas falsas, dejaban de fabricar durante un tiempo, algo que les mantenía en un perfil bajo y despistó a las autoridades. Por ello no ha sido hasta 2024, durante un control de alcoholemia, que los agentes encontraron 48 bolsas llenas de monedas dentro un vehículo. Este hallazgo trasladó a los agentes hasta Villacañas, en Toledo, donde finalmente localizaron el taller.

¿Cómo distinguir las monedas falsas?

Y es que diferenciar una moneda de 2 euros verdadera de otra falsa no es tan fácil como puede parecer, por muy acostumbrados que estemos a tratar con ellas. La propia Policía Nacional ha compartido este miércoles una imagen en su perfil de X, anteriormente Twitter, en la que aparecen dos monedas de 2 euros: una legal y otra incautada del taller ilegal y por tanto falsa. Después, desde su cuenta han retado a los usuarios a identificar cuál de ellas era la falsificada.

Aunque en la fotografía de la Policía se puede apreciar lo mucho que ambas piezas se parecen entre sí, se pueden obviar algunas diferencias que nos ayudarán a reconocer cuándo nos están intentando timar con dinero falsificado. La primera clave, consiste en revisar el alineamiento de los elementos de la moneda haciéndola girar. De esta manera comprobaremos que tenga los grabados de ambas caras totalmente alienados en sentido vertical. Otro truco, es que las monedas de 2 euros poseen un magnetismo en su centro, por lo que podrían pegarse a un imán. Algunas monedas falsas no poseen esta capacidad. Y por último, debemos fijarnos en la superficie del mapa de Europa, que en las monedas auténticas es rugosa. De no serlo, nos encontraríamos ante una moneda falsa.

Síguenos en Whatsapp y recibe las noticias destacadas y las historias más interesantes