Aunque son miles las personas ingresadas en los hospitales por coronavirus, también hay muchos otros pacientes que, por no presentar sintomatología grave, pasan la enfermedad en sus domicilios.

Esto hace que deban seguir unas rigurosas pautas para evitar el contagio de las personas con las que conviven. Las recomendaciones del Ministerio de Sanidad incluyen qué debe haber en la habitación en la que se aísle el enfermo y cómo han de actuar este y sus familiares. Sin embargo, es fundamental sumar a estos consejos los efectuados por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.

Se trata de una serie de directrices de buenas prácticas sobre cómo gestionar los residuos del infectado, tanto dentro del domicilio, como en el momento de deshacerse de los mismos.

Los residuos en casa

Todo el material desechable que utilice el enfermo, tales como guantes, pañuelos y mascarillas, así como cualquier otro residuo del mismo, se ha de echar en el cubo que debe haber en la habitación en la que esté aislado.  

Se recomienda que este cubo tenga tapa y pedal de apertura y que en su interior se coloque siempre una bolsa de plástico con cierre hermético. En el momento de retirarla, es importante cerrarla bien antes de sacarla de la habitación. (Bolsa 1)

La mascarilla y los guantes del cuidador se depositarán en una segunda bolsa de similares características a la anterior (Bolsa 2) que se situará a la entrada del cuarto.  

A continuación, la bolsa uno se introducirá en la bolsa dos y se cerrará adecuadamente.

La bolsa única resultante se meterá en la bolsa de basura del hogar destinada a la fracción resto.

A continuación, se realizará un completo lavado de manos con agua y jabón durante 40-60 segundos.

Deshacerse de los residuos

Para deshacernos de estos residuos tendremos que dirigirnos a los contenedores del vecindario y tirar la bolsa, única y exclusivamente, en el contenedor de fracción resto, que suele ser gris.

Está terminante prohibido dejarla en los contenedores de recogida separada (orgánico, envases, papel, vidrio o textil), junto a estos o en el entorno.  

Tras tirar la bolsa al contenedor, se recomienda lavarse inmediatamente las manos.

Vertedero o incineración

Las bolsas de estos contenedores no deben abrirse de forma manual y han de ir directamente al vertedero o se incineradas.

En caso de que sea necesario tratamiento previo, este ha de llevarse a cabo de forma automática. La recuperación de materiales solo se realizará de este modo. Para extremar la seguridad, las autoridades competentes podrán acordar que los materiales queden almacenados durante al menos 72 h.

Protocolos y equipos de protección

Tanto para la recogida de residuos, como en todas las plantas que reciban este tipo de bolsas, se desarrollarán protocolos específicos para la protección de los trabajadores o se revisarán los ya existentes. Asimismo, se dotará a los empleados de equipos de protección individual (EPI).

Mientras dure la crisis, se podrán establecer recogidas diferenciadas de las bolsas (tipo 2) procedentes centros o lugares donde se dé un elevado nivel de afectados por COVID19 (residencias, hoteles hospitalizados, etc.).

Estas bolsas se identificarán externamente y de manera fácil, con, por ejemplo, cinta aislante o similar y se depositarán conforme a la forma que establezcan las autoridades responsables de la recogida de residuos.

En estos momentos en los que circula tantísima información, recordamos que es más importante que nunca seguir las recomendaciones sanitarias que ofrecen los organismos oficiales, a las que Quirónsalud se suma.