Hace tan solo unos días que Pablo Iglesias abrió las puertas de la Taberna Garibaldi, el pasado martes 19 de marzo, en el centro de Lavapiés, en Madrid. Un salto del que fuera líder de Podemos al sector de la hostelería que ha sido muy bien acogido por el público, especialmente por los simpatizantes de las políticas del exvicepresidente del Gobierno. Pero solo cinco días después de su inauguración, este bar -que ha sido objeto de polémicas por su carta- ha tenido que echar el cierre, tal y como el propio establecimiento ha anunciado a sus puertas y en las redes sociales. Pero, ¿por qué? Este es el motivo por el que ha cerrado la Taberna Garibaldi y cuándo volverá a estar en pleno funcionamiento.

Relacionado Cierra Taberna La Concha, el restaurante que volvió loco a Chicote en 'Pesadilla en la Cocina'

Cierra el bar de Pablo Iglesias

Este domingo 24 de marzo, la Taberna Garibaldi, el bar de Pablo iglesias, ha tenido que cerrar por fuerza mayor. Así lo han comprobado algunas de las personas que se han acercado durante la mañana al local, situado en el centro del madrileño barrio de Lavapiés, donde se han encontrado este establecimiento con la persiana bajada y un cartel pegado en la fachada en el que se anunciaba este cierre. En este documento, la dirección de esta tasca -en manos del que fuera vicepresidente del Gobierno nacional- especifica el motivo por el que han tenido que clausurar la actividad con un escueto mensaje que ha corrido por las redes sociales. Y es que se produce tan solo cinco días después de su inauguración. 

"Cerrado por avería en tubería de agua. Disculpen las molestias. Muchas gracias", roza en este anuncio, que deja claro que el local ha experimentando un problema derivado por una cuestión técnica, lo que les ha obligado a bajar la persiana y dejar a sus clientes sin servicio durante este domingo, especialmente señalado en el calendario al ser Domingo de Ramos, día en el que comienza de forma oficial la Semana Santa. De la misma forma han informado a sus seguidores a través de su cuenta de X, antes conocido como Twitter. "Descansamos para hacer una última reparación y para proveernos de cerveza que habéis vuelto a agotar", ha escrito la empresa con sorna en esta red social.

Pero que nadie se asuste. Para tranquilizar a sus garibaldinos -forma en la que denominan a sus clientes más fieles- la tasca de Iglesias ha indicado que va a ser solo temporal y que será el próximo martes 26 de marzo cuando vuelvan a abrir las puertas de la Taberna Garibaldi entorno al medio día. Esta no es la única polémica en el inicio de la actividad de este nuevo establecimiento, anunciado por sorpresa por el exdirigente de Podemos. Ya en sus primeros días fue muy criticado por la carta, donde había fotos de la carta copiados de internet e imágenes del interior del bar poco estéticas, lo que llamó la atención de los seguidores y usuarios de las redes sociales. Muchos de ellos calificaron de fake los platos que ofrecían a los parroquianos.

 

Relacionado La polémica empresaria Patricia García, en las quinielas para ser la futura conselleira de Infraestructuras de Galicia

Desavenencias, por 'Polònia'

Junto a estos pequeños problemas, también ha habido margen para el humor. El equipo de Polònia no ha podido asistir a la inauguración de la taberna, pero no han desaprovechado el tiempo y solo han tardado unos días en ilustrar el ambiente del bar y lo que podría pasar en un futuro. Todo ello a través de una de sus celebradas parodias, en la que nos presentan a Pablo Iglesias dando un discurso inicial. "Compañeras, son muchos los que ha querido enterrarme pero yo, Pablo Iglesias Turrión, sigo luchado por los desposeídos y la justicia social. Y la prueba es este proyecto que va a sacudir los cimientos del sistema, la Taberna Garibaldi", aparece diciendo un falso dirigente de Podemos.

Sin embargo, y ahí está la broma, tan solo unos minutos después de este emocionante comienzo se inician las desavenencias entre Iglesias y el personal del bar a raíz de unas croquetas. Esto provoca en la ficción una primera separación de la taberna. "Yo no estoy de acuerdo con la lista de croquetas. No puede ser que la croqueta de cocido esté por debajo de la de setas. Esta carta es personalista y colonial", dice uno. Por su parte, el supuesto gerente también muestra una visión distinta a la del cocinero, por lo que también decide separar su camino. "Pues si no te gusta lo que hay, monta tu propio bar", dice, evocando a una escisión en Podemos al estilo Más Madrid o Sumar.

De aquí sale el Gastrobar Unidas Bebemos y la Bodega Pimplar. "Están intentando boicotear mi concepto de snack bar transformador y suplantarlo por una tasca más cómoda", explica el propio dirigente en esta parodia, que se encuentra con otra piedra en el camino. "No queda cerveza en el tirador y tampoco hay barriles. Igual tendríamos que haberlo previsto", asegura, una situación que genera una nueva trifulca entre los miembros del bar. "Estas criticas internas le hacen el juego al gallego de la esquina. Estas actitudes no tienen cabida en Unidas Bebemos", critica antes de dejar el establecimiento para vender en la calle. "Al final he vuelto a las plazas, que es donde se hace la auténtica política y la auténtica hostelería", sentencia.

 

Síguenos en Whatsapp y recibe las noticias destacadas y las historias más interesantes