La Sala de lo Penal del Tribunal Supremo ha condenado a 5 años y 7 meses de prisión y multa de 600.000 euros a un funcionario de la Seguridad Social en Zamora que cobró durante 16 años la pensión de su abuelo fallecido por importe total de 549.000 euros, que tendrá que devolver ahora.

El tribunal le acusa en su sentencia de un delito continuado de defraudación de prestaciones de la Seguridad Social y de falsedad de documento oficial.

La sentencia estima parcialmente el recurso del acusado, que había sido condenado por la Audiencia de Zamora, con confirmación del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, a 7 años y 3 meses de prisión, por delitos de estafa, falsedad en documento mercantil y fraude a la Seguridad Social. 

Era jefe de Sección en la Dirección Provincial de Zamora

En los hechos probados de la sentencia de la Audiencia se destaca que el acusado era funcionario público del Instituto Nacional de la Seguridad Social y estaba destinado en la Dirección Provincial de Zamora, como Jefe de Sección de control de Pensiones. Para realizar los delitos usó las claves para la tramitación de las pensiones de la seguridad Social y se valió de “su ascendencia” como jefe de los funcionarios que trabajaban en la Sección, informa una nota de prensa del Poder Judicial.

Benefició a su padre en su pensión 

El hombre reactivó en el año 2000 la pensión de su abuelo, que había muerto en agosto de 1993, y estuvo cobrando la prestación, cuya cuantía fue de 549.541,21 euros en total, hasta que, en abril de 2016, le dio de baja por fallecimiento. También ha quedado probado que introdujo modificaciones en el expediente de la prestación por jubilación de su padre, de modo que éste cobró 35.994 euros más de lo que debía.

Activó una pensión ilegal para una amiga

Las irregularidades de este funcionario no terminaron aquí, ya que se ofreció a ayudar a una amiga que tenía problemas económicos, a favor de quien rehabilitó una pensión de viudedad que había sido dada de baja por fallecimiento de su beneficiaria a la que sustituyó para dicha amiga. Asimismo, activó una pensión de orfandad en beneficio del hijo de esa mujer. Los importes totales percibidos de manera incorrecta fueron de 13.263 y 5.147,40 euros.

La amiga también fue condenada por la Audiencia de Zamora (ella no recurrió la sentencia) a un año y 10 meses de prisión por delito continuado de fraude a la Seguridad Social. Por estos dos últimos hechos, los dos acusados deberán indemnizar solidariamente al Instituto Nacional de la Seguridad Social en la cantidad de 19.259,77 euros.