La Policía Nacional ha expulsado del país a un joven de nacionalidad brasileña que fue arrestado el mes pasado por hacer grafitis a favor de ETA en diferentes lugares públicos de la localidad vizcaína de Sodupe y en el pórtico de su iglesia, reconocida como de interés histórico-cultural por el Gobierno Vasco.

El hombre, de 25 años y en situación irregular, acumuló más de 40 antecedentes por delitos como robo con violencia, quebrantamiento de condena, daños, lesiones, atentado a la autoridad, resistencia y desobediencia, coacciones, delitos contra el patrimonio histórico, apología del terrorismo o violencia de género, según ha informado la Policía Nacional.

Debido a estas detenciones, debía presentarse cada 15 días en varios juzgados de Vizcaya y, además, "su radicalización era tal, que llegó a tatuarse un símbolo de ETA en uno de los brazos".

Dado que "su comportamiento representaba un claro riesgo para la convivencia ciudadana y la paz social, especialmente ante el menosprecio y humillación mostrado hacia las víctimas del terrorismo", la Brigada de Extranjería y Fronteras de Bilbao inició los trámites para su expulsión del país, siendo trasladado al Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) de Madrid.

El joven intentó sin éxito solicitar Protección Internacional/Asilo en este CIE, ya que la Oficina de Asilo y Refugio (OAR) rechazó la solicitud por falta de argumentación, según ha relatado la Policía.

Debido a las múltiples causas judiciales pendientes en los Juzgados de Balmaseda y Barakaldo, los agentes también tuvieron que obtener la autorización previa de los titulares de los mismos para llevar a cabo su expulsión.

Finalmente, el 28 de junio se ejecutó la expulsión, siendo escoltado hasta Brasil por dos agentes de la Brigada de Extranjería y Fronteras de Bilbao en un vuelo regular entre Madrid y Río de Janeiro.

boton whatsapp 600