Recientemente, la Policía Municipal de Madrid denunció a un gimnasio del distrito de Vicálvaro (Madrid) por ofertar clases de un arte marcial, con fotos de niños peleando, como método para combatir el acoso escolar.

Según la Policía Municipal, este anuncio podría vulnerar la Ley de Garantías de los derechos de la Infancia y Adolescencia en la Comunidad de Madrid, ya que sería una clara apología de la violencia. Además, agentes tutores ya localizaron el pasado viernes en otro gimnasio del distrito madrileño de Hortaleza la misma oferta: clases de Krav Maga -así se llama el arte marcial- dirigida hacia niños y niñas a partir de los cuatro años de edad.

Tras la intervención de los agentes, es ahora el Gobierno regional quien tiene en sus manos tomar la decisión si al gimnasio se le abre o no un expediente. De hacerlo, podría acarrear una multa de entre 3.000€ y 60.000€.

Posturas contrarias al anuncio

Desde la Asociación Madrileña contra el Acoso Escolar (AMACE) se señaló que “la violencia no podía combatirse con más violencia”, tachando el anuncio de “lamentable”. De hecho, no fueron los únicos en manifestarse acerca de este suceso, ya que la Policía Municipal de Madrid también indicó que “los agentes tutores trabajan cada día en la prevención de situaciones de acoso escolar o bullying en colaboración con los centros escolares, las familias y las administraciones públicas”.

Llegados a este punto, ¿por qué razón podría denunciarse un anuncio así? Si tomamos como referencia la Ley de Garantías de los derechos de la Infancia y la Adolescencia de la Comunidad Madrid, son varios los puntos sobre los que apoyaría esta postura.

El Artículo 31 del Capítulo I encontrado en el Titulo III señala que se prohíbe “la entrada de menores en establecimientos donde se desarrollen actividades o espectáculos violentos, pornográficos o con otros contenidos que atenten al correcto desarrollo de su personalidad”.

Igualmente, dentro de este mismo Título el artículo 68 de Capítulo VI explica los principios básicos de actuación exponiendo que “será prioritaria la acción preventiva, incidiendo en los factores de riesgo que originen la marginación y la delincuencia, fomentándose las actividades que favorezcan los procesos de integración social del menor”.

Posible sanción para el gimnasio

A falta de la resolución del Gobierno regional, desde La Sexta se informa que el gimnasio ya se pronunciado acerca de la denuncia, manifestándose totalmente en contra de la misma.

Ahora mismo, todo apunta a que la sanción podría ser económica y, tal y como indica el Capítulo II del Título IV, podría darse de tres formas distintas: una amonestación de hasta 3.000€ si la infracción es leve; una multa de entre 3.000€ y 30.000€ si la infracción es grave; una multa de entre 30.000€ y 60.000€ si se considera una infracción muy grave.