Desde que en 2016 anunciaron su separación, Brad Pitt y Angelina Jolie se han visto rodeados de constantes rifirrafes que han ido formando un camino de piedras hasta poder llegar a un acuerdo de divorcio. El más reciente corresponde a la acusación que ha hecho la actriz sobre Brad Pitt culpándole de dejarla “en números rojos” para poder ganar la batalla legal.
Según ha podido declarar Angela Jolie, el actor, a pesar de sus constantes intentos por negarlo todo, no se cansa en querer “hacerse con el control” de toda la situación. En esta línea, ha sido cuando la actriz ha añadido que su ex pareja estaría intentando “dejarla sin dinero” para poder ganar el juicio.
En este sentido, el periódico británico Daily Mail ha publicado unos documentos judiciales en los que se recoge la defensa de la actriz acusando al actor de “controlarla y agotarla financieramente”. De la misma manera, los escritos presentados por los abogados de Angelina Jolie ratifican los abusos sexuales que sufrió no solo ella sino también sus hijos. “Si bien la historia de abuso físico de Pitt hacia Jolie comenzó mucho antes del viaje en avión de la familia desde Francia a Los Ángeles en septiembre de 2016, este vuelo marcó la primera vez que también dirigió su abuso físico hacia los niños. Ese fue el motivo por el que Jolie quiso separarse de él inmediatamente”.
Cambios en la custodia
Con esto hacen referencia a un vuelo que hicieron desde Francia hasta Los Ángeles en el que el entonces matrimonio tuvo una acalorada discusión, convirtiéndose en la gota que colmó el vaso para que Angelina pidiera el divorcio y la custodia de sus seis hijos. A finales de septiembre de 2016, poco después de este vuelo, los medios estadounidenses anunciaban que la actriz se había quedado finalmente con la custodia, pero con régimen de visitas por parte de Brad Pitt, siempre mediante la vigilancia de un terapeuta y con test de alcohol y drogas. Sin embargo, a pesar de que estuvieron dos años en los que parecía que todo marchaba como debía, en 2018 la decisión de un juez volvió a cambiar las reglas del juego. Entonces, el actor podría llamar y enviar mensajes a sus hijos sin la necesidad de tener la supervisión de la actriz. No conforme con esto, Angelina acusaba a su ex pareja de no cumplir con la manutención de los hijos, aunque este se mantenía firme en que sí que lo hacía y que había pagado más de 1,3 millones de dólares desde la ruptura.
Acusaciones por abusos sexuales
Posterior a esta acusación, llegó otro periodo de aparente paz en el que Brad Pitt podía ver a sus hijos con mayor frecuencia y en el que la pareja parecía haber alcanzado un supuesto acuerdo sin pasar por los banquillos. Pero como ya es habitual en este caso, en 2020 Angelina Jolie volvió a levantar a voz pidiendo al Tribunal Superior de Justicia que apartara al juez que llevaba el divorcio por supuesta conexión con Brad Pitt. No siendo esto posible, un año más tarde llegaron las acusaciones hacia el actor de violencia de género y abuso infantil y reclamando así la totalidad de la custodia. No obstante, el juez decretó la custodia compartida y la actriz recurrió la decisión del juez, que finalmente se apartó del cargo, consiguiendo así la petición inicial de Angelina.
Venta de la bodega francesa
Desde ese momento hasta el día de hoy, todo han sido trabas en el camino para poder firmar un definitivo divorcio. No solo los presuntos abusos sexuales protagonizan esta tensa relación entre la expareja y los hijos, sino también la venta de la bodega francesa Château Miraval, que la pareja había comprado en Francia cuando todavía estaban juntos. La disputa parte de la voluntad de la actriz de deshacerse de su parte de la bodega, lo que fue demandado por parte de Brad Pitt por no habérselo consultado. Ahora, un tiempo después, la nueva acusación hacia el actor se centra en la manipulación económica ejercida sobre Angelina con la intención de ganar el juicio.
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