El mes de agosto no ha hecho más que comenzar. Apenas llevamos dos días. Dos jornadas en las que el calor extremo vuelve a ser tendencia en el apartado climatológico. La “anomalía” de julio abrió paso a un periodo de altas temperaturas, incluso por encima de lo habitual. No obstante, éste será breve, pues a partir de este miércoles, la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) pronosticaba una bajada de los termómetros en prácticamente todo el país. El propio organismo se ha aventurado a establecer una predicción para el periodo agosto-septiembre y el pronóstico no es del todo favorable a pesar de atisbar datos positivos. Si bien conceden un 50% posibilidades a que el trimestre sea “más lluvioso” de lo normal, creen que también se caracterizará por un calor por encima de los niveles habituales.

Los termómetros en el recién empezado mes de agosto siguen reflejando valores superiores a los 30 grados en la mayor parte del país, con el mercurio superando la frontera de los 40 en otras áreas del territorio nacional. Un calor extremo tras un final de julio marcado por una “anomalía térmica" que volverá a la Península a partir de este miércoles gracias a un frente atlántico que suavizará unas temperaturas que incluso han sido elevadas por la noche, dificultando el sueño de los españoles. Estas breves vacaciones que se toman las altas temperaturas contrastan, sin embargo, con la predicción de la Agencia Estatal de Meteorología para este trimestre. Los meses de agosto, septiembre y octubre registrarán marcas térmicas por “encima de lo normal” en todo el país.

Así lo ha explicado el organismo a través de un hilo publicado en la red social Twitter. La AEMET estima que la tendencia en España “será más cálida de lo normal en la mayor parte del país”, pues la relajación del mercurio no se mantendrá la próxima semana y ni mucho menos lo hará en la segunda quincena del mes. El calor extremo regresará para quedarse. Lo mismo ocurrirá en los dos meses siguiente. Septiembre y octubre estarán marcados por un incremento de los termómetros, uno de los más altos de la serie histórica según explican desde la agencia. “El escenario más probable es el de temperaturas muy posiblemente por encima de lo normal en todo el país”.

No obstante, la predicción no es del todo catastrófica. Si bien dificultará la vida a los españoles, máxime si por las noches el calor no se toma un respiro, la AEMET se muestra optimista en lo relativo a las precipitaciones. De hecho, explican que existe un 50% de probabilidades de que el trimestre de “agosto-septiembre-octubre” sea más lluvioso de lo habitual en buena parte del territorio nacional, con la excepción de áreas del noroeste peninsular y el Cantábrico, frente a un 20% de probabilidades de que se produzca el caso contrario; es decir, que sea “más seco de lo normal”.

Alerta naranja

En lo que compete a la jornada de este miércoles, la AEMET mantiene en alerta amarilla o naranja a un total de 16 comunidades autónomas por temperaturas máximas muy altas, superando incluso los 41 grados centígrados. La agencia también declara avisos de riesgo por fenómenos costeros, especialmente en el norte de la Península, donde se esperan olas que pueden alcanzar los cinco metros de altura. De este modo, Zaragoza, Valencia, Murcia y Málaga se teñirán de color naranja, con un mercurio que amenaza con superar los 40º. En cambio, la alerta amarilla se extiende por el resto de la península, donde las temperaturas oscilarán entre los 34 y 39º, a excepción de A Coruña, Lugo, Asturias, Cantabria, Vizcaya y Guipúzcoa, donde se prevén vientos del noroeste con fuerza 7. Misma situación se vivirá en Canarias, especialmente en Gran Canaria, La Palma, La Gomera, El Hierro y Tenerife, donde se eleva el riesgo de fuerte oleaje.

En líneas generales, las temperaturas se mantendrán en ascenso en zonas de Andalucía, del tercio oriental y centro peninsular, así como en el archipiélago canario. En buena parte del territorio predominarán cielos poco nubosos, aunque el esperado frente atlántico advertirá de su presencia en el extremo norte peninsular, aumentando las nubes y las precipitaciones en Galicia y Asturias, aunque se prevén débiles y se irán desplazando al resto de la zona Cantábrica a lo largo de la jornada del miércoles.

En cambio, las máximas descenderán en el extremo noroeste peninsular, de modo que se superarán los 34 o 36ºC en gran parte de la mitad interior sur de la Península y en el interior nordeste. Las temperaturas mínimas, por su parte, descenderán en el extremo noroeste e interior sudeste peninsular pero aumentarán en la meseta Norte, sin bajar de 24 o 26ºC en las costas del Mediterráneo.