La ministra de Agricultura, Pesca, Medio Ambiente y Alimentación, Isabel García Tejerina, ha asegurado este martes que, si continúa la sequía en los dos próximos meses, “habrá restricciones de agua para el regadío para favorecer la del consumo de la población”.

Y es que el problema de la sequía, aunque no se hable prácticamente nada de él en los medios, ya supone una situación nunca vista en la península y un tema “amplio y complejo” para el Gobierno, según ha reconocido la ministra.

Según datos de este mismo 24 de octubre, los embalses españoles se encuentran al 37,75% de su capacidad, una cantidad que no ha dejado de descender desde hace varios meses y que las últimas lluvias de la pasada semana, torrenciales, no se han notado en las reservas.

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Aunque el Gobierno no hable de la sequía, la hay y es grave

La situación no tiene precedentes ya que la media de agua embalsada en esta semana en los últimos 10 años era superior al 50% de la capacidad total y hace un año era del 68,49%. El estado de las reservas de agua es crítico en algunas cuencas como la del Duero, a un 19,5% de su capacidad y donde ya se han producido cortes al regadío para asegurar el consumo, o la del Segura, al 13.58%.

Por comunidades autónomas, están están por debajo de la media de la última década. Especialmente grave es la situación que encontramos en Castilla-La Mancha, con las reservas están al 18,4%, o en La Rioja, con el dato más bajo de la península, el 16,2%.

En Madrid, los embalses que abastecen a la capital y a las localidades de la sierra no tienen están en esta situación crítica, pero sí muestran síntomas de preocupación, con sus reservas ya al 42,7% y bajando.

 

Influencia en el precio de la luz

Esta situación de falta total de lluvias también afecta a los embalses de producción de energía hidroeléctrica y, por consiguiente, al precio de la luz. Este lunes, día en el que el precio de la luz ha alcanzado su punto álgido del año, la generación de electricidad ha recaído en gran medida en tecnologías más caras, en especial en las centrales de ciclo combinado, que utilizan el gas natural como combustible.

A las 19 horas, los ciclos combinados aportaban el 32,8% de la energía generada y las plantas de carbón, el 15,1%. Por el contrario, la energía hidráulica apenas representaba el 5,1% del total, y la eólica, el 8,3%.