Con la pandemia como telón de fondo, José Luis Rodríguez Zapatero y Juan Lobato han protagonizado un encuentro de reflexión y análisis sobre los nuevos escenarios políticos actuales en la localidad madrileña de Torrelodones. Hablar de futuro ha sido el principal eje del diálogo entre ambas figuras socialistas, desgranar las principales claves sobre qué le depara a la política española en cuanto la covid-19 remita.

Abanderado con el lema “el PSOE va a hacer su trabajo”, Juan Lobato ha empezado tomando la palabra aludiendo al escándalo político protagonizado por el PP durante estos últimos días. “En Madrid, como sabéis, tenemos un día entre ayer y hoy bastante intensos. Estamos preocupados porque tenemos una crisis política e institucional, es una situación complicada”.

En el mismo sentido, ha esgrimido las dos principales tareas de la formación socialista ante tal vorágine política: “En primer lugar, fiscalización contundente, hemos pedido la comparecencia de la presidenta, pero qué casualidad que va a estar tres semanas sin estar en la Asamblea. Pedimos que vaya ya y exigimos responsabilidades. La segunda tarea del PSOE es dignificar la política, explicar con claridad a los ciudadanos que Madrid no es así, que la democracia tiene que triunfar, Madrid tiene que dejar de ser la portada de todos los medios por el bochorno de corrupción y por el espionaje. Madrid tiene que ser una región modelo para este país, un Madrid que apueste por la transparencia, por la tecnología, por la democracia, por ese Madrid vamos a trabajar”, concluía Lobato.

Por su parte, el expresidente del Gobierno, aseguraba que el PP “está en el abandono de la defensa del interés general”. “No hay ningún partido democrático de Gobierno en Europa que haga esto, no hay partido de centroderecha europeo que vote en contra de una reforma laboral que está en contra de los empresarios. El PP es el partido que más se parece al PP, pero el PSOE es el partido que más se parece a España (…) Las ideas son las que marcan la dirección de un partido y un país, las elecciones de Castilla y Léon son fruto de la ansiedad de Casado, su posición en los fondos europeos, en la reforma laboral”.

Regresando a lo que podría deparar al país tras la pandemia, Zapatero evoca a una época clave: “En esta pandemia se debería de haber impuesto el valor de la solidaridad. Recordando lo que fue los primeros siglos de XX, la guerra mundial coincidió con la gripe española, ¿es posible que repitamos un clima, saliendo de una pandemia, de confrontación? Como siempre, los grandes movimientos de ideales que anteceden a las ideas y movilizan movimientos políticos es lo que tenemos que procurar hacer. Siempre he pensado que el PSOE merece ganar por sus méritos, siempre hemos mostrado una grandísima lealtad a la democracia de este país”.

“Diálogo constructivo” y riqueza de España a nivel mundial

Frente al populismo y la confrontación, el PSOE plantea tener “un diálogo constructivo y positivo para poder tener realidades de cambio”. “Tener rebeldía y ansiedad, todo lo contrario a lo que les pasa a Casado y Ayuso, tienen rebeldía pero no ansiedad”, argumentaba.

“La España más global fue la del siglo XV, hemos sido un país global salvo cuando la derecha gobernara este país que nos ha encerrado en la tristeza y la miseria. Para nosotros España es un ejemplo, somos un país admirado, ojalá tantos países de Europa tendrían el español, que también se habla en América Latina. El máximo liderazgo y crecimiento social y político es estar en el mundo”, aseveraba a continuación el expresidente del Ejecutivo.

Derechos, la clave del futuro

Otra de las claves que se ha llevado a reflexión ha sido los derechos de la población, tanto como de las generaciones más mayores como la de los jóvenes. En este sentido, Lobato ha querido remarcar el compromiso del PSOE: “La ambición que tenemos que tener como partido es que la hace mejor a la población”. “La importancia del PSOE tiene que estar en dirigirnos a los amplios sectores de la sociedad, planteando con intensidad los nuevos derechos de ciudadanía, que es complejo, como a la vez tenemos la capacidad también de los municipios que no tienen cajero automático, gente mayor que no tiene la posibilidad de ir al banco a ver si le han ingresado la pensión. Eso es un partido amplio, también con el reto de los jóvenes, cómo ofrecerles un proyecto de país. El PSOE es un partido serio y que está aquí para cambiar la realidad, no para tener posiciones ideológicas del momento”, defendía.

Zapatero, para abordar esta cuestión, se ha referido al ámbito más político, recordando dos de las medidas que más han favorecido a la ciudadanía durante los últimos tiempos: la reforma laboral y el ingreso mínimo vital. “Sabemos que ha habido críticas, pero construir un buen sistema social lleva su tiempo

Por Madrid, para Madrid

Para finalizar el encuentro, el secretario general del PSOE madrileño ha vuelto a poner sobre la mesa el compromiso y los proyectos de cara al futuro de la formación para llevar a Madrid a un nuevo cambio de rumbo: “Para los cambios reales, tienen que ser para las grandes mayorías, con rebeldía, sensatez y ambición, es lo que necesitamos en Madrid. Madrid tiene posibilidades de cambio, sectores que van a depender de nosotros, de concentrarnos en hacer pedagogía sin ansiedad, explicar ese modelo moderno y dinámico que puede ser Madrid, el libre y referente. Madrid quiere liderar para compartir, no liderar en sí, poder iluminar social y culturalmente, generar derechos… a eso aspiramos”, finalizaba.

Al final del acto, ambos dirigentes socialistas han respondido a las preguntas de la prensa sobre la guerra abierta en el PP. Así, Zapatero ha deseado una solución a los populares: "Los partidos son fundamentales para el sistema democrático y el PP es un partido importante. Yo deseo que tengan una reflexión y que puedan asumir esta crisis, porque no es bueno institucionalmente ni para nadie". Además, ha añadido: "Ojalá de esta crisis saliéramos con una lección y es que la moderación, los límites y la responsabilidad son fundamentales en la política".

Por su parte, Juan Lobato ha ironizado con lo vivido en la Comunidad de Madrid en los últimos días: "Después del día de ayer, que fue el día de las acusaciones, hoy hemos tenido el día de las versiones alternativas y contradictorias. Tanto Casado como Ayuso parece que van amoldando sus versiones. La presidenta Ayuso comenzó negándolo todo, por supuesto, y ha tenido que acabar reconociéndolo".