Trece registros y nueve detenciones se han producido en Bélgica cinco días después de los atentados de Bruselas, donde un homenaje a las víctimas en la plaza de la Bolsa se vio perturbado por la irrupción de un grupo de ultras. Una reportera de Antena 3 fue incordiada mientras realizaba un directo desde la plaza de la Bolsa.
Radicales interrumpen la manifestación
Este domingo, cientos de personas acudieron a la plaza de la Bolsa de Bruselas para rendir homenaje a las víctimas de los atentados y expresar su rechazo al terrorismo.
Las autoridades belgas habían pedido que por cuestiones de seguridad no se celebrase esta concentración hasta dentro de unas semanas, pero muchas personas decidieron acudir igualmente a la céntrica plaza, convertida en símbolo del dolor colectivo.
La protesta pacífica se vio interrumpida cuando un grupo de radicales de extrema derecha, que se referían a sí mismos como "Belgian Hooligans (Hooligans belgas, en inglés)", se presentó en la plaza y comenzó a gritar proclamas xenófobas, que solo recibieron abucheos por parte de los ciudadanos presentes en el lugar.
La Policía antidisturbios tuvo que intervenir para evitar que el enfrentamiento se transformara en un choque más grave.
Golpearon el micrófono a la reportera española
La periodista Marta Sasot, corresponsal de Antena 3 Noticias que cubre desde Bruselas la última hora tras los atentados en la ciudad, fue incordiada mientras intentaba explicar la concentración que se estaba desarrollando en la Plaza de la Bolsa.
Los ultras fueron obligados a abandonar la plaza por la Policía y una decena de ellos fueron detenidos.El primer ministro belga, Charles Michel, condenó firmemente lo sucedido y pidió "respeto" en un momento de duelo para todo el país.