La Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) no solo fue el escaparate de Ada Colau para iniciar su carrera política sino que en sus diferentes ramificaciones locales consiguió visibilizar un grave problema que fue asumido por las formaciones del 'cambio'. Una vez consumados los relevos en buena parte de los ayuntamientos de España la decepción ha llegado, primero con la que fuera su portavoz a la que reprochan no haber hecho "lo necesario" en Barcelona, y luego con otro de los referentes de las expectativas de cambio, Manuela Carmena. 

Malestar creciente con la Oficina de Intermediación

La PAH de Madrid mantuvo desde el inicio de legislatura roces con la alcaldesa de Madrid, de hecho se movilizó para exigir el cierre de la Oficina de Intermediación Hipotecaria creada por el equipo de Carmena por considerar que estaba al servicio "de las tesis de las entidades financieras" y era doblemente peligrosa por "el efecto imitación que puede generar en otros Ayuntamientos y Comunidades donde prevalezca el lucro político del gobierno de turno frente al estudio y solución de los problemas con implicación real de los afectados". 

Dentro del calendario de movilizaciones contra esa oficina de intermediación municipal la PAH se ha concentrado este miércoles frente a la sede del Ayuntamiento de Madrid y allí el discurso contra la alcaldesa ha elevado el tono sustancialmente. Uno de los coordinadores de la plataforma, Luis Chamarro, ha acusado a la oficina de ofrecerles a los hipotecados en apuros la dación como única opción y "a perder lo que han dado, a quedarse en alquiler que no se puede llamar social durante tres años antes de irse a la puta calle".

Lo hubieran esperado del PP
Chamarro, en declaraciones recogidas por EFE, ha denunciado que le presentaron a Carmena un escrito contra la oficina que no ha merecido respuesta e insiste en que no se van a callar porque "
está en juego nuestra vida". Este portavoz cree que la situación en el Ayuntamiento es "incomprensible y absolutamente repugnante" porque algunos miembros del Gobierno local habían trabajado antes con la PAH: "Lo que más duele es la traición; si el PP hubiera puesto esto en marcha lo hubiésemos visto normal y coherente y lo hubiéramos denunciado y peleado igual. Lo que es incoherente es que un gobierno como este ponga en marcha una iniciativa con tales características".