A escasas jornadas de que los comicios sentencien las especulaciones y acaben con toda la duda que pende sobre los colores que primarán en el hemiciclo, José Félix Tezanos, presidente del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), advierte: “El barómetro realizado por el CIS era válido para ese momento. Ahora mismo no se puede saber cuál es el pulso actual y la decisión de la ciudadanía”, ha asegurado. “En aquel momento el 36% de los encuestados no sabía qué iba a votar. De aquí al domingo estoy seguro de que todavía habrá gente que pincele su opinión”.

Lo ha hecho en Hora 14 (Cadena SER), informativo del mediodía conducido por José Antonio Marcos. A las preguntas del locutor, el sociólogo español muestra abiertamente su opinión: “Estoy seguro de que la participación promedio subirá. Hay muchas personas que entiendes que estas elecciones son clave”, ha asegurado. "En el caso de la izquierda está claro que la opción predilecta es el PSOE. Sin embargo, en la derecha hay un equilibrio bastante inestable, ha asegurado.

A pesar de ello, el voto indeciso y oculto se mira con recelo desde Ferraz y Génova. Los dos partidos mayoritarios no comprenden los cambios en las encuestas y observan con incredulidad lo que pueda suceder el próximo domingo. Las sumas importan más que vencer, pero la gobernabilidad se puede volver muy compleja dependiendo de qué estructuras entren con fuerza en la Cámara Baja.

“Son unas elecciones cruciales, como en el 79 o el 82 y la gente se lo piensa mucho”, ha dicho Tezanos a la par que afirmaba que la gente se lo pensará muy bien esta vez: "La gente va a pensar de forma sosegada en qué pasará a partir del lunes: qué va a pasar en España  si ganan unos u otros, cómo va a ser nuestra relación con Europa, qué va a pasar con Educación y la Sanidad, qué va a pasar con las mujeres y la lucha contra la violencia de género. Debemos tomar una decisión calmada y madura".

Una indecisión que puede provocar que los cimientos de la Carrera de San Jerónimo de tambaleen con la entrada de nuevos rostros que tiempo atrás eran impensables. "Lo de Vox es un misterio y nadie va a saber qué poder tienen hasta que estén todos los datos escrutados". 

La extrema derecha ha venido para quedarse y puede ser clave, más de lo que predice la demoscopia, para que el nuevo Ejecutivo sea de una vertiente u otra.