Las encuestas se han equivocado. Lo que parecía que sería un resultado rompedor para el Partido Popular, con una victoria incontestable y sólida, se ha quedado, en realidad, en un tímido triunfo por un corto margen con el PSOE, y en el que los de Feijóo no tienen la posibilidad de formar gobierno por el mal resultado de Vox, que ha causado que las derechas no puedan formar mayoría parlamentaria. Todos los sondeos pronosticaban una férrea victoria del PP y daban al PSOE un segundo lugar a más de 30 escaños de distancia, salvo uno: el del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) de José Félix Tezanos, quien, a pesar de haber sido señalado por haber sido el único encuestador que pronosticó la victoria de los socialistas, ha sido el que más cerca se ha quedado, en análisis porcentual, de acertar. 

La última encuesta flash del CIS, del lunes 17 de julio, daba la victoria electoral al Partido Socialista con un 32,2% de los votos, y dejaba al PP como segunda fuerza con un 30,8%. Unos datos que le valían a Tezanos para ser fuertemente criticado y para que su credibilidad fuera puesta en duda por muchos, entre otros, por Narciso Michavila, director de GAD3, encuestadora que, por su parte, pronosticó en su último sondeo una victoria 'popular' con un 37,1% de los votos, y al PSOE muy lejos con un 28,5%.

 

Sin embargo, el 23J le ha terminado dando la razón a Tezanos, errando el resultado del PP por un margen de 2,1 puntos y el del PSOE por 0,5, frente a los 4,3 y 3,2, respectivamente, a los que se ha quedado Michavila. 

 

 

Única encuestadora que pronosticaba la victoria del PSOE

No había otra encuesta en todo el panorama demoscópico que pronosticara la victoria del PSOE aparte del CIS. Cierto es que la primera fuerza ha sido el Partido Popular, pero el acierto de Tezanos no va tanto en la línea de haber acertado el vencedor, sino de haber demostrado escepticismo hacia una victoria incontestable de la derecha. La derecha ha ganado, pero con un margen muchísimo menor del que pronosticaban el resto de encuestadoras. De esta forma, puede decirse que aunque Tezanos tampoco haya acertado de pleno, sí que ha sido el que más cerca se ha quedado de dar un pronóstico fiel a lo que realmente ha ocurrido. En otras palabras, Michavila le ha hecho bueno.

A su vez, ya fuera de los pronósticos de las encuestas y dentro de los resultados electorales propiamente dichos, cabe destacar que el frenazo en la derecha no se explica tanto por el hacer de los conservadores, sino por la caída en barrena de la extrema derecha. Vox ha perdido más de 600.000 votos y 19 escaños con respecto a las elecciones de noviembre de 2019, sufriendo una gran migración de voto al Partido Popular. La encuesta de Michavila daba a los de Abascal un 11,8% del voto, mientras que el CIS de Tezanos le situaba en una cifra similar, 11,7%. Ambos subestimaron a la extrema derecha, ya que se ha hecho, finalmente, con un 12,3% del voto, que no les sirve ni para acercarse a su anterior resultado electoral.

Entre las filas del PSOE, por otra parte, el resultado que auguraba Tezanos fue recibido con buenos ojos frente a los augurios del resto de encuestadoras. La retórica socialista durante toda la campaña, en la misma línea, ha sido la del espíritu de remontada. Y no la hubo como tal, pero se consiguió el principal objetivo: evitar un maremoto conservador. De este resultado final, más cerrado de lo que pronosticaban casi todos, se pueden dilucidar diferentes motivos: la revulsiva presencia de José Luis Rodríguez Zapatero en la campaña del PSOE, las mentiras del candidato del PP y su ausencia en el debate de candidatos, los pactos de los 'populares' con la extrema derecha, o una elevación del discurso hasta límites que han cansado a buena parte del votante de derechas moderado, pueden ser algunas de las razones que han gestado este nuevo panorama parlamentario.

Michavila: "El PSOE tuvo un arreón en la recta final"

A raíz de la desviación en las encuestas, Michavila se ha pronunciado en la mañana de este lunes en 'El Programa de Ana Rosa', donde ha dado sus impresiones sobre los resultados.

"Los partidos pequeños, en realidad, los hemos acertado. Ha sido el PSOE en el que más nos hemos alejado, porque tuvo un arreón al final de la semana. La sorpresa ha sido en los dos grandes, por un votante socialista que ha estado tres puntos por encima de lo que pronosticamos nosotros", ha desgranado. 

"Además, los escaños que ha perdido el PSOE fuera de Cataluña, que han sido en el País Vasco y en Navarra, han sido 12, y eso era lo que a nosotros nos estaba saliendo como una fuerte pérdida. Sin embargo, se ha compensado con la pérdida de hasta nueve escaños por parte de los partidos nacionalistas, de los que siete han ido directamente al partido de Pedro Sánchez", ha explicado.