El Tribunal Supremo ha ratificado la sentencia de absolución para Rodrigo Rato, expresidente de Bankia, además de otras 33 personas acusadas de delitos de estafa a los inversores y falsedad contable en el juicio por la salida a bolsa de la entidad bancaria que posteriormente provocó un gasto público de 22.424 millones de euros. La Sala de lo Penal ha afirmado que "no se advierte error palmario alguno, ni argumentos apodícticos o absurdos" que pudieran conducir, según las intenciones de los recurrentes, a la anulación del fallo de la Audiencia Nacional.

Tras el rescate de Bankia, decisión acometida por el Gobierno de Mariano Rajoy, la Fiscalía Anticorrupción renunció a recurrir la sentencia que absolvía a todos los acusados, mientras que, por su parte, los jueces del alto tribunal han tomado en consideración para su examen los recursos de la Asociación Española de Accionistas Minoritarios de Empresas Cotizadas (AEMEC) y de Bochner España, únicas organizaciones que recurrieron y a las que se sumaron otras de las partes en el juicio.

La sección tercera de la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo ha rechazado los dos recursos de casación presentados contra la decisión judicial que emitió la Audiencia Nacional el 29 de septiembre de 2020. Hace ya más de dos años, este tribunal corroboró que todos los supervisores dieron su visto bueno a la salida a bolsa de Bankia -Banco de España, Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), FROB y Autoridad Bancaria Europea (EBA)-.

Rato, con otro juicio por delante

Además, la propia Audiencia Nacional verificó que el folleto contenía una "amplia y certera" información financiera y no financiera y aseguró que tanto la decisión de concurrir en bolsa como la de hacerlo con la estructura de doble banco "fueron resoluciones enteramente contempladas por el Banco de España", que a través de su Servicio de Inspección "supervisó y aprobó todos los pasos". En aquel proceso judicial quedaron al margen tanto la cúpula del banco central español, el Banco de España, como de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

Rodrigo Rato, vicepresidente económico del Gobierno de José María Aznar, presentó su dimisión como presidente de Bankia en mayo de 2012 y en la actualidad sigue bajo una condena con control telemático por el escándalo de las tarjetas black de Caja Madrid, una de las cajas de ahorros que se fusionó con otras seis para formar la entidad bancaria que da nombre al caso judicial del que acaba de ser absuelto. En menos de seis meses, el próximo 21 de abril de 2023, acabará el cumplimiento de su pena.

Sin embargo, Rato aún tiene por delante otro juicio, denominado con su apellido, el caso Rato, en cuyo banquillo de los acusados se situarán 17 investigados por delitos fiscales, de corrupción entre particulares y blanqueo de capitales. En el mes de septiembre de este año, el Juzgado de Instrucción número 31 de Madrid trasladó el proceso judicial a la Audiencia Nacional, tribunal que desde entonces se está encargando de la investigación.