De los 13 cargos que se vacunaron en la Comunidad Valenciana sin que les correspondiera -ocho políticos, tres sindicalistas, un fiscal y un obispo-, sólo tres de ellos han renunciado a sus puestos.

Se trata de la concejala de Sanidad del Ayuntamiento de Dénia, Cristina Morera; el fiscal jefe de Castellón, José Luis Cuesta, y el secretario general valenciano del sindicato Comisiones Obreras (CCOO PV), Arturo León, según adelanta El diario.es.

Cristina Morera se vacunó junto a algunos familiares el 12 de enero en una residencia la Santa Lucía, mientras que el fiscal José Luis Cuesta lo hizo el 29 de enero en el centro de Salud 9 de Octubre, del que es coordinadora su mujer. Por su parte, el secretario general valenciano del sindicato Comisiones Obreras (CCOO PV), Arturo León, se vacunó el 15 de enero, antes de recuperar su plaza como técnico de riesgos laborales en el hospital General de Alicante.

El resto se aferra a sus puestos

El resto de cargos que se colaron en el proceso iniciado el 27 de diciembre conservan sus puestos. Es el caso de Jesús García, secretario de Salud de UGT, quien se vacunó el 12 de enero y el 3 de febrero en el hospital Doctor Peset de València. García puso su cargo a disposición de la dirección del sindicato, que rechazó relevarlo del mismo.

El obispo de Orihuela-Alicante tampoco renuncia

El obispo de Orihuela-Alicante, Jesús Murgui, quien se vacunó el pasado 8 de enero en la Casa Sacerdotal de Alicante con la primera dosis de Pzifer contra la COVID-19 junto a su hermana y su cuñado también conserva su cargo, lo mismo que el vicario general de la diócesis, Vicente Javier Martínez Martínez, y los sacerdotes vinculados a la Casa Sacerdotal.

Varios alcaldes de PSPV y PP

En el listado de los políticos que se vacunaron y se aferran a sus cargos están los alcaldes de El Verger, Ximo Coll, y de Els Poblets, Carolina Vives, ambos del PSPV, quienes se vacunaron juntos el 8 de enero. También está Luis Rubio, alcalde de Villahermosa del Río (PP), administrador de la residencia en la que se vacunó.

Francisco López López, alcalde de Rafelbunyol (PSPV), se vacunó el domingo 27 de diciembre con una dosis que supuestamente sobró al final de la jornada, mientras que el alcalde de la Nucía, Bernabé Cano (PP), lo hizo el 6 de enero en una residencia Savia de la localidad, mientras la concejala de Residentes Extranjeros de la localidad, Jessica Gommans (PP), hizo lo propio la residencia Montebello.

El concejal de Sanidad de Orihuela, José Galiana (PP), se puso la vacuna sin que le correspondiera y Ángel Ribes (PSPV), alcalde de Benlloch, fue suspendido de militancia cautelarmente.