“Vamos muy mal, señor Sánchez”. Así de tajante se ha mostrado el líder del Partido Popular, Pablo Casado, durante su intervención en el pleno del Congreso con motivo de la comparecencia de Pedro Sánchez para dar cuenta de los asuntos tratados en el último Consejo Europeo. Casado ha insistido en que el Gobierno trata de vender una recuperación económica tras la pandemia de coronavirus que no se corresponde con la realidad, pese a que todos los indicadores macroeconómicos dan la razón a Sánchez. El hartazgo del presidente ha sido tal que ha instado al líder de la oposición a aclarar anta toda la ciudadanía si España está en quiebra o, por el contrario, crece.

El dirigente popular ha acusado a Sánchez de “vender” una recuperación robusta y justa” cuando “España va muy mal”, tildándole incluso de arrogante, incompetente y mentiroso. Casado ha recordado los “recortes de José Luis Rodríguez Zapatero, reiterando que el expresidente socialista dejó “un país quebrado”.

En su turno de réplica, Sánchez ha instado a Casado a repetir -si cuenta con la gallardía necesaria- que “España está en quiebra”: “¿España está en recuperación o en quiebra? Tengo una diferencia respecto a muchos españoles que le escuchan. Yo me tomo en serio sus palabras. Lo que dice desde esta tribuna tiene su valor. Y me gustaría que aclarara lo siguiente públicamente: ¿España está en quiebra o está en recuperación? Usted dice que en quiebra. La economía española crece a tasas positivas. No es responsable ni sensato transmitir mensajes erróneos ni jugar con las esperanzas”.

El presidente, visiblemente airado, ha reprochado al líder de la oposición que “dice que hay cuatro millones de parados cuando los registros más recientes dicen que hay 3.257.068 parados. No son cuatro millones. ¿De dónde saca usted los 800.000 restantes?”. “¿Sabe quién gobernaba cuando se llegó al 27% de paro? El PP. ¿Saben cuál fue la tasa de paro juvenil en ese mismo trimestre, en 2013? El 57%”, ha apuntillado Sánchez; quien ha precisado que “tenemos 20 millones de empleados” y “no teníamos ese dato desde antes de 2008”. “No utilicen la desinformación si quieren que la gente les tome en serio”, ha zanjado.

"No utilicen la desinformación. Es muy difícil tomárselo en serio”, ha lamentado Sánchez, poniendo punto y final al rapapolvo propinado a Casado a cuenta de los datos falsos que ha deslizado sobre la economía española.