El Gobierno regresa cuatro años después a Quintos de Mora este fin de semana. Pedro Sánchez ha citado allí a sus 22 ministros este sábado, como ya se ha convertido en tradición tras echar a andar el nuevo Ejecutivo. En principio, se espera que los miembros del Ejecutivo solo pasen allí el sábado, y desde el Gobierno señalan que la reunión ya estaba agendada antes de la votación de los reales decretos que sacó adelante Junts.
No es el único presidente que ha tenido grandes citas en Quintos de Mora. La finca fue la protagonista de la visita de Lula da Silva con José Luis Rodríguez Zapatero durante su mandato y para los encuentros entre Aznar y Bush. Fue precisamente la visita de José María Aznar con el estadounidense George W. Bush en 2001 la que hizo popular el recinto.
Enclavada en los Montes de Toledo, la finca de Quintos de Mora abarca una superficie de más de 6.800 hectáreas y pertenece al municipio de Los Yébenes. Es propiedad del Estado desde 1942, ha sido el lugar elegido por algunos presidentes del Gobierno para recibir las visitas de otros mandatarios.
En la cita de este 2024 no todos los que acudieron a la última repetirán. De hecho, tan solo ocho, incluido el presidente del Gobierno, volverán a la cita. En concreto, y contando a Pedro Sánchez, regresarán Teresa Ribera, Margarita Robles, María Jesús Montero, Fernando Grande-Marlaska, Yolanda Díaz, Luis Planas y José Luis Escrivá.
En la cita se estrenará buena parte del Ejecutivo con José Manuel Albares, Félix Bolaños, Óscar Puente, Pilar Alegría, Jordi Hereu, Ángel Víctor Torres, Isabel Rodríguez, Ernest Urtasun, Carlos Cuerpo, Mónica García, Pablo Bustinduy, Diana Morant, Ana Redondo, Elma Saiz y Sira Rego.
Se perderán la cita rostros como Carmen Calvo, Pablo Iglesias, Nadia Calviño, Arancha González-Laya, Juan Carlos Campo, José Luis Ábalos, Isabel Celáa, Reyes Maroto, Carolina Darias, José Manuel Rodríguez Uribes y Salvador Illa.
Así será la jornada
Según han informado fuentes del Gobierno, será un encuentro de trabajo del que no trascenderá su contenido, en el que tratarán diversos asuntos de forma menos rígida que en las reuniones habituales del Consejo de Ministros. A él asistirán todos los miembros del Ejecutivo de coalición y será la primera vez que estén presentes en esa finca algunos de los actuales integrantes del Gabinete.
Sin contar los datos sobre la seguridad que rodea al Gobierno, podemos hacernos una idea aproximada de lo que costará este retiro. En 2020, cuando acudieron Pedro Sánchez, Pablo Iglesias y el resto de ministros del Gobierno antes de la pandemia, tuvo un coste total de 2.115,77 euros. La manutención -los ministros y sus acompañantes comieron allí- ascendió a 1.165,78 euros, y la locomoción, es decir, el transporte costó 949,99 euros. Mientras, la factura de la cita de agosto de 2018 en el mismo lugar, cuando se produjo la moción de censura que expulsó a Mariano Rajoy de La Moncloa fue de 6.806,15 euros.
Las jornadas positivas
El Gobierno calificaba en 2020 de "muy productiva" la sesión de trabajo que hicieron en 2020 "para debatir y analizar las grandes transformaciones que necesita España". El Ejecutivo, según informaba la Secretaría de Estado de Comunicación, compartía sus prioridades en la agenda legislativa que querían realizar.
"El Gobierno se coordina, pone en común sus políticas y aprovecha también este día para una convivencia que es absolutamente necesaria para que al final nos entendamos cada miembro del Gobierno solo con mirarnos", decía al respecto María Jesús Montero
Montero daba más detalles de los que vamos a tener ahora explicando que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, había trasladado "cuáles son las prioridades" que tenían para ese primer trimestre del año -recordemos que todo voló por los aires por la pandemia- y para toda la legislatura.
Esas prioridades pasaban por el crecimiento económico, por la creación de empleo de calidad y la identificación de los sectores emergentes en esta materia, así como la "capacidad de recuperar los derechos en relación con la educación la sanidad o la dependencia". Además, señalaba al cambio climático, asegurando que "ocupa prácticamente toda la agenda de los distintos departamentos".
"No hay nada más sano que intentar salir de nuestros entornos habituales y tener la capacidad de conocernos mejor, de entender mejor las claves que cada uno tiene en su cabeza para desarrollar las políticas del futuro, ver cuáles son los puntos de coincidencia y que cada uno multiplique la acción de otro compañero", resumía sobre esta jornada campestre del Gobierno.
