El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, ha asegurado que en todo este proceso interrumpido de renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), “la dignidad la ha puesto Manuel Marchena y la vergüenza Pablo Casado y Pedro Sánchez”. El juez ha renunciado este este martes a presidir tanto el CGPJ como el Tribunal Supremo y ha defendido su independencia como magistrado 24 horas después de que el portavoz del PP en Senado, Ignacio Cosidó, sacara pecho de controlar la Sala Segunda “desde atrás”.

El líder naranja, en una entrevista en Espejo Público, ha preguntado a socialistas y populares: “¿No les da vergüenza?”. Considera que “no han estado a la altura”, máxime “en un momento en que nos jugamos todo”, haciendo referencia al proceso judicial de los líderes políticos independentistas encarcelados.

“El problema no son los jueces españoles, es la politización de la Justicia”, asegura Rivera, quien ha instado a PSOE y PP a no retomar las negociaciones y reformar la ley para que “los jueces los elijan los jueces, no Génova y Ferraz”.

El secretario de Organización del PP, Javier Maroto, ha culpado a la ministra de Justicia, Dolores Delgado, de que todo saltara por los aires por haber filtrado detalles del acuerdo. “Los españoles no entienden que se conozca el presidente antes que los vocales”, ha dicho. Ahora, los de Casado han dado por roto el acuerdo y no retomarán las negociaciones “hasta que Delgado no sea cesada”. En este sentido, Rivera se pregunta “por qué Delgado era una magnífica interlocutora ayer y hoy es la ‘ministra más sucia’, según Maroto”.

A la pregunta de si hay tiempo para reformar la Ley antes de que finalice el mandato de Carlos Lesmes, el presidente de Ciudadanos señala que hay una ley naranja que será presentada en el Congreso en diciembre o a principios del próximo periodo de sesiones (febrero). “Se puede enmendar”, ha insistido Rivera, “el problema es que están encantados de controlar a los jueces”, concluye.

Arrimadas y “el pacto de la vergüenza”

La líder de Ciudadanos en Cataluña, Inés Arrimadas, también ha querido valorar el paso atrás de Marchena.

Arrimadas ha definido como “un pacto de la vergüenza” entre PP y PSOE en el Consejo General del Poder Judicial. “Nuestros jueces y fiscales están muy por encima de los intentos de presiones y control de PP, PSOE Podemos”, añade.

Por ello, pide que se despolitice la Justicia y que se vote la propuesta de su partido que pone sobre la mesa que los vocales y presidentes del órgano de gobierno d ellos jueces no sean escogidos por las formaciones políticas.