A medida que avanza el calendario y se apuran los plazos para Vistalegre IV, el cariz de torna más tenso entre las distintas candidaturas a liderar Podemos. La ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra, recogerá el testigo de Pablo Iglesias, pero no lo hará exenta de polémica. Esteban Tettamanti, concejal morado en San Lorenzo de El Escorial, ha agitado la campaña a pocos días del cónclave que tendrá lugar este domingo 13 de junio exigiendo “transparencia” a su contendiente y que aporte las facturas de los gastos de todos los eventos que ha realizado hasta ahora.

Tettamanti es perfectamente consciente de que Belarra parte con ventaja tras ser designada por el exsecretario general, pero pide a su rival “juego limpio” y debate para poder contrarrestar ideas y proyectos en igualdad de condiciones.

En este sentido, ha hecho especial hincapié en la necesidad de “transparencia” a la hora de publicar los gastos de campaña. Su candidatura lo ha hecho a través de su página web y exige que Belarra haga lo propio, detallando de dónde salen los fondos y a qué se han dedicado.

El edil morado, de hecho, ha recordado que la candidatura Nuevo Impulso, comandada por Fernando Barredo, quien ya amargó Vistalegre II y III a Iglesias, judicializó el proceso de primarias y la cúpula “debería tomar nota” porque “la transparencia no solamente se debe exigir a los demás, sino también ponerla en práctica”.

El candidato a las primarias ha lamentado en sus últimos encuentros con inscritos que en Podemos “no puede haber una única voz, sino que se debe tener la suficiente madurez como para entender que en un partido plural los matices enriquecen”.

A su juicio, “está dinámica de pensamiento único nos ha llevado a perder a muchas personas valiosísimas en estos años; y “si se sigue apostando por silenciar y por callas a las voces discordantes con la Dirección, terminaremos por desaparecer o quedar reducidos a un partido marginal, sin apenas fuerza para acometer los cambios sociales y políticos que exigen la gran mayoría de los ciudadanos”.

Fair play

Tettamanti también ha acusado obstáculos que han dificultado su candidatura: “No se nos ha respondido claramente sobre todas las consultas que hemos ido haciendo a las diferentes áreas responsables de la organización”. Según cuenta, “han estado pasándose la pelota entre ellas, tomándose demasiados tiempos para dar respuestas evasivas”.

A este respecto ha pedido “juego limpio” y que la cúpula supere cualquier tipo de complejo pasado, puesto que “parece que a la Dirección le parece mal que haya otras alternativas y otras voces dentro del partido”.

Una voz hegemónica lejos de democratizar Podemos reduce su base militante y, por ende, sus posibilidades electorales”, sentencia.

En consecuencia, Tettamanti ha pedido un debate entre los distintos candidatos alegando que “los inscritos merecen que se confronten propuestas y visiones antes de decidirse por uno u otro”. “No debatir e ignorar la existencia de alternativas define claramente el concepto de democracia que tienen desde la candidatura Crecer [la de Belarra]”, ha afeado.