El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha admitido ante el Tribunal dos de los asuntos que más le comprometen y le vinculan con la trama Gürtel: los sobresueldos y su relación con el cabecilla de la trama, Francisco Correa. Rajoy ha asegurado que no conocía “en absoluto” la caja B del Partido Popular, pero sí que ha confirmado que existían sobresueldos, aunque los ha llamado “complementos”: “Cobrábamos un sueldo de diputado y bastantes personas del partido tenían un tenían complemento que se declaraba a Hacienda. Cuando dejamos el Gobierno dejamos de cobrar ese complemento porque no se podía hacer”, ha sentenciado Rajoy



Asimismo, Rajoy ha recurrido al argumento del “yo eché a Correa”. El presidente del Gobierno ha mencionado que se reunión con el tesorero del partido, por aquel entonces Álvaro Lapuerta, y éste “me dijo que algunos proveedores estaban utilizando el nombre del PP en ayuntamientos”. Rajoy ha asegurado que no conocía a Correa, “le habré visto en algún mitin, si lo conocía era de saludarlo en un acto público y tampoco puedo afirmarlo nítidamente”, pero Lapuerta le había dicho que “algunos proveedores estaban usando el nombre del partido. Yo le pregunté [a Lapuerta] si consideraba que había cosas que no se ajustaban al derecho y me dijo que no tenía pruebas”, pero sí ciertas suspicacias. Rajoy le preguntó a Lapuerta si le constaba que estos “proveedores” cometían actos irregulares y “me dijo que no tenía pruebas”.