La cúpula popular no descarta exigir a María Dolores de Cospedal su marcha definitiva, eso es al menos lo que se percibe de declaraciones filtradas por cargos del PP a los medios. La exnúmero dos del partido se aferra a su acta de diputada y un salario de 2.891 euros brutos al mes, a los que hay que añadir el complemento como presidenta de la comisión de Asuntos Exteriores (1.470 euros) y otros 1.874 euros, libres de impuestos, por el cargo.

Cospedal aceptó el lunes abandonar el comité ejecutivo del PP tras el escándalo de las grabaciones de Villarejo, pero mantiene, además, de su acta de diputada, su asiento en la Junta Directiva Nacional del partido, el máximo órgano de dirección.

Olla de presión en el PP

El chorreo de declaraciones de cargos y diputados del PP a los medios deja entrever que la cúpula no descarta exigir a Cospedal su marcha y hablan de una dimisión “en fases”. En Génova están a la espera de nuevas grabaciones que comprometan aún más a la exsecretaria general.

"O se marcha o le damos un empujón"

Un dirigente regional ha asegurado que “o se marcha o va a obligar a la dirección nacional a darle un empujón”, según Libertad Digital. Este diario cuenta que amplios sectores del partidos consideran que la situación es insostenible y una parte, incluso, reclama que se aplique el código ético y se abra un expediente a Cospedal.

Un miembro de la dirección popular ha dicho que el caso de Cospedal “recuerda cada vez más al caso Cifuentes”, quien se resistió a dimitir en un comienzo y terminó haciéndolo. Génova ha filtrado que ve "inaceptables" los audios de Cospedal, su marido, el empresario Ignacio López del Hierro, y el excomisario Villarejo, y ha admitido que no aprueban cómo gestionó la entonces secretaria general la crisis del caso Gürtel, Bárcenas y la financión irregular del partido.