La mesa electoral de la discordia en los comicios al Ayuntamiento de León, 7-5B de Pastorinas, continúa generando polémica. Un error de transcripción en el acta provocó el caos más absoluto. La JEC ya ha subsanado los fallos y ha echado a Vox del Consistorio, lo que facilitaría la articulación de un Gobierno progresista. El PP y Vox han recurrido los resultados del recuento, pero en sus alegaciones los populares no incluyen lo que sería la prueba definitiva.

De esta forma, la constitución del Consistorio se retrasará y no se formalizará el próximo 15 de junio. Como mínimo, siempre que finalmente el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León desestime la causa, hasta el 5 de julio no tendrá lugar.

Un baile de votos que ha generado el caos y la atención mediática en León por la importancia del reparto de sillones. El bloque de la derecha se queda en minorías, después de que Vox perdiera su representación. 

Los ultras califican de “pucherazo” lo sucedido, y dicen que lo firmado debe prevalecer. Elena Merino, presidente de la lista, mostró su malestar públicamente: “Consideramos que tenemos la razón. Las cosas firmadas tienen validez. Vamos a presentar el recurso y, a partir de ahí, esperamos a ver qué ocurre”.

Por su parte, UPL califica de “aberración y vergüenza política” la situación. "Después del 26 de mayo León vive todavía en la incertidumbre para la constitución del Ayuntamiento y el comienzo de un nuevo mandato que debería de ser de la recuperación de la ciudad, y sin embargo los recursos de PP y Vox han llevado a la paralización de la institución hasta que se resuelvan los mismos", señalan.

Esta es la situación actual del Ayuntamiento, a la espera de que los juzgados diriman el resultado final. Diez ediles para el PSOE, nueve para el PP, cuatro para Ciudadanos, tres para UPL y uno para Podemos.