“Hoy es un día histórico”. Esta es la expresión que se repetía y una y otra vez en los pasillos del Congreso de los Diputados. Y efectivamente, lo ha sido. Por primera vez en la historia de la democracia española ha prosperado una moción de censura.  Pedro Sánchez ha sido investido presidente del Gobierno con más votos (180) de los que en su día recibió el ya expresidente Mariano Rajoy (170). Sentimientos encontrados. Alegría en la bancada socialista, desconsuelo en las filas populares. Las caras lo decían todo.

A las 08:00 horas el Congreso de los Diputados comenzaba a llenarse de periodistas, todos conscientes de que esta jornada se estudiará en los libros de historia. Treinta minutos más tarde, a las 08:30, se abrían las puertas del Palacio, donde se encuentra el hemiciclo. Desde el pasillo los periodistas veían uno por uno los rostros de lo asistentes. Las caras largas del PP contrastaban con la emoción del grupo socialista. Se podía aventurar el partido de cada diputado con tan solo observar sus ojos. Suena el tono que indica que el pleno va a dar comienzo, y una pregunta sobrevuela todo el Congreso: “¿Y Rajoy?”

Moncloa había confirmado que el por entonces presidente del Gobierno acudiría, pero no aclaró cuándo. La presidenta de la Cámara, Ana Pastor, daba el pistoletazo de salida a la sesión, pero Rajoy seguía sin aparecer.

Con más de dos horas y media de retraso Rajoy ha hecho su aparición estelar. Cabizbajo y sin media palabra, ha enfilado el pasillo de Palacio y ha entrado al hemiciclo por la primera de las puertas, cuando normalmente suele entrar por la segunda, evitando así un camino más largo que la prensa pudiera grabar.

El expresidente ha llegado únicamente para pronunciar unas palabras. “A la vista de lo que todos sabemos, podemos presumir que la moción de censura saldrá adelante y el señor Sánchez seré el nuevo presidente del Gobierno, y quiero ser el primero en felicitarle”, ha dicho el aún líder del Ejecutivo. Y con los ojos vidriosos, ha concluido: “Ha sido un honor, no lo hay mayor, haber sido presidente de España”.

La votación ha sido por llamamiento y de viva voz. La sala del Escritorio se ha llenado de periodistas. Todos de pie y atentos, grabando con sus respectivos teléfonos móviles el histórico momento. Pastor ha pronunciado las palabras mágicas y han podido escucharse algunos comentarios de júbilo: “Bravo”, “les hemos echado”…

El secretario general del PSOE llegó al hemiciclo como el líder de un partido y sin escaño, y sale como presidente. Decenas de periodistas aguardaban a las puertas del hemiciclo y cientos en el patio. Comentarios de todo tipo. Hay quien comentaba los “huevos que le ha echado Pedro” y hay quien se lanzaba a calificar el estado del PP de “funeral”.

Antes que los socialistas, otros parlamentarios abandonaban el hemiciclo. Especialmente contentos los diputados de Podemos y las confluencias, quienes celebraban con abrazos, saltos, sonrisas y tuits la marcha de Mariano Rajoy. Unas sonrisas que fueron interrumpidas durante unos segundos por los aplausos de los parlamentarios del PP a Rajoy cuando abandonaba el Congreso, ya como expresidente.

Los últimos en abandonar la sala fueron los socialistas, que aprovecharon para hacerse fotografías y ovacionar y jalear al nuevo presidente. Pedro Sánchez.