El vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Derechos Sociales y Agenda 2030, Pablo Iglesias, ha evitado pronunciarse sobre si siente que su posición es más fuerte tras sacar a Ciudadanos del acuerdo de Presupuestos Generales del Estado (PGE). El líder morado se ha limitado a recordar que era harto complicado sumar a los naranjas con el resto de fuerzas progresistas, al tiempo que ha reivindicado el papel de EH Bildu.

Iglesias ha asegurado en una entrevista en La Hora de la 1 que se tratan de unas cuentas “sin precedentes en términos de política expansiva” y ha justificado que los de Inés Arrimadas fueran orillados: “Era muy difícil que una fuerza que gobierna territorios con el apoyo de Vox pudiera estar dentro de unos Presuestos progresistas”.

“Con Ciudadanos es razonable llegar a acuerdos puntuales. Nos apoyaron en el estado de alarma, pero han decidido gobernar con Vox y PP”, ha añadido

En este sentido, ha reivindicado a EH Bildu como parte fundamental “un bloque” que prevé estable para la legislatura.

A su juicio, “Bildu ya es un partido normalizado” pese a los vituperios que profieren las derechas. El secretario general de Podemos ha argumentado que “los que renuncian a la violencia siempre tendrán la mano tendida para la democracia”. “Bildu está haciendo política y negociando, y esa es la mejor noticia. Tenemos que congratularnos de las declaraciones de Iñárritu condenando el terrorismo y la presencia de Mertxe Aizpurua en el homenaje a Lluch”, ha precisado.

Pablo Iglesias ha lamentado que “la derecha y la ultraderecha prefieren que esto no ocurra, pero es un éxito de la democracia. El PP es un partido fundado por siete ministros de una dictadura militar. Que renunciaran e hicieran un camino hacia la democracia hay que celebrarlo”.

Sobre si sería aconsejable que para completar ese camino hacia la normalización Arnaldo Otegi diera un paso a un lado y dejara de liderar la formación abertzale, Iglesias ha respondido que “eso no nos corresponde a nosotros”: “Los militantes de Bildu tienen que elegir. Yo jamás le diría a un militante a quien tiene que elegir. No me corresponde entrar en cuestiones internas de otros partidos”. Asimismo, ha apostillado que tampoco pediría al PSOE que prescindiera de Felipe González.

La polémica enmienda

La enmienda pactada entre Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) y Unidas Podemos sobre la paralización de los desahucios (que fue retirada en pos de un real decreto) suscitó tensiones entre los socios de Gobierno. En este sentido, el vicepresidente segundo ha subrayado que es algo habitual, pues “hay muchas enmiendas del Grupo Socialista”; al tiempo que ha comunicado que el real decreto será aprobado en el próximo Consejo de Ministros. “Si no es posible, para el siguiente”, ha zanjado.